La Asociación Pakistaní en La Rioja ultima los trámites de repatriación a Pakistán del cadáver del trabajador fallecido el pasado 25 de julio durante el derrumbe del edificio en obras de la antigua residencia de Adoratrices en Logroño.
El presidente de esta organización, Fida Ullah Noor, ha detallado el proceso este lunes, en una rueda informativa en la que también ha participado el embajador de Pakistán, Shujjat Ali Rathore, de visita en La Rioja. Ullah Noor ha explicado que el comité de difuntos de la asociación se encargará de los gastos de repatriación del trabajador, que tiene un coste de entre 9.000 y 10.000 euros, y se sufraga gracias a las aportaciones del millar de socios de esta entidad.
Ha explicado que la asociación ha colaborado en los trámites para la repatriación y reagrupación familiar, ya que algunos de los hijos del trabajador fallecido viven en Pakistán. En este sentido, el embajador ha precisado que, al margen del comité de difuntos que funciona en todas las comunidades con mucha presencia pakistaní asentada, la Embajada colabora económicamente para ayudar, porque son unos procesos muy largos.
FOTO: EFE/ Raquel Manzanares.
En La Rioja hay una comunidad pakistaní de unas 4.000 personas, por lo que el embajador ha viajado a la región para conocer a sus compatriotas y reunirse con las autoridades, de modo que mañana tiene previsto un encuentro con representantes del Gobierno regional.
Además, ha aprovechado su visita para sensibilizar sobre la situación del pueblo de Cachemira, tras la revocación en 2019 del artículo 370 de la Constitución de la India, que daba autonomía a esta región.
El embajador ha expresado su “preocupación” por esta revocación, que ha provocado “la violación de derechos humanos” en Cachemira, a la que se debe “devolver su estatus real y su derecho a la autodeterminación”.
Por ello, ha pedido a la ciudadanía riojana que ejerza presión ante los gobiernos de los países democráticos europeos para que, “al margen de sus relaciones comerciales con la India”, reclamen que “se respeten los derechos humanos en Cachemira”.
