Nuevo lavado de cara para una de las infraestructuras que identifican a Logroño de un simple vistazo. El Puente de Piedra permanece cerrado al tráfico durante las mañanas de esta semana, debido a los trabajos que se deben realizar para reparar parte de la instalación de alumbrado exterior ornamental.
El pasado mes de diciembre se desprendieron dos de las luminarias del puente y los técnicos municipales observaron el grave deterioro en todos los elementos de sujeción de las luminarias a la estructura, por lo que se solicitó al fabricante la garantía correspondiente, cuyo período exigido por el Ayuntamiento de Logroño es de cinco años.
Aprovechando la menor densidad de tráfico del verano, el Ayuntamiento trabaja esta semana en la sustitución de las 84 luminarias del puente, labor para la que se ha recurrido a un ‘gigante’ cuyas dimensiones obliga a cortar el tráfico rodado de la infraestructura, permitiendo la circulación peatonal por la acera contraria al lado donde se esté ejecutando la obra.
Estos trabajos solo pueden ser realizados por una maquinaria especial para poder trabajar en la parte superior de los arcos del puente. Por ello, debido a la escasa disponibilidad de este tipo de camiones, se han buscado las fechas más idóneas para realizar los trabajos.
