La organización es la clave del éxito de cualquier mudanza; pero no solo estamos hablando de nivel logístico, sino también en el tema del presupuesto. Es importante empezar con tiempo y planificando bien cómo vamos a embalar, las cosas de las que podemos prescindir, el medio de transporte más adecuado, entre otras características. Pero también es fundamental controlar los precios de mudanzas que se manejan, para hacernos una idea de si lo que nos van a cobrar es caro o barato.
Según las estadísticas, las empresas de mudanzas cobran entre 350-1800 euros por sus servicios. Esta disparidad de precio depende de algunos factores como es el caso del volumen, de la ciudad o ciudades en donde se va a ejecutar el servicio, y la distancia a recorrer. Es cierto que muchos de los gastos no se pueden evitar, pero sí que se pueden reducir en cierta medida.
Los 5 mejores consejos para ahorrar en tu mudanza sin sacrificar la calidad
1. Limpieza inicial
No solo es importante limpiar antes de embalar, sino hacer un detallado proceso de selección para elegir las cosas que vas a llevarte y cuáles no. Piensa en todo aquello que no va a caber en la nueva casa y decide si lo donas, lo vendes o lo tiras. Podríamos estar hablando desde ropa, hasta utensilios de cocina incluso muebles.
Todas las cosas nuevas a las que no les vayas a dar uso deberías ponerlas a la venta. Con este dinero podrás pagar una parte de la mudanza. Puedes probar con un mercadillo para ver si se vende algo. Piensa que las empresas de mudanzas te cobran por volumen de mudanza: cuánto menos tengas que transportar, mucho mejor.
2. Elección del mejor momento
Hay ciertos momentos del año y de la semana en donde la mudanza te va a salir más costosa. Verano es la época del año más cara y lo mismo pasa en los fines de semana. Algunas empresas también te cobran más si decides organizar la mudanza a final de mes, por lo que deberías evitar este periodo.
3. Aprovecha el espacio al máximo
Lo más probable es que la empresa de mudanzas te vaya a cobrar por bultos, así que debes aprovechar cualquier rincón para guardar tus cosas, siempre y cuando viajen en buenas condiciones de seguridad. Esto quiere decir que puedes aprovechar para llenar las maletas con cosas que no se puedan dañar y los cajones de los muebles.
4. Planea con la suficiente antelación
Las prisas no son buenas y te terminarán pasando factura. Si no tienes mucho tiempo, aprovecha unos minutos al día para empezar a embalar. Es una tarea muy pesada, pero dedicándole un poco de tiempo al día se hará más ligera.
5. Contrata un seguro
Aunque suponga pagar un poco más, vale la pena invertir en un seguro por lo que pueda pasar.
Sigue estos 5 consejos y verás cómo ahorras en tu mudanza.
