El programa municipal de colonias felinas de Logroño controla a unos 700 gatos repartidos entre 65 asentamientos, en los que hay un nivel de esterilización que se sitúa entre el 30 y el 60 por ciento de los animales.
La concejala de Bienestar Animal de Logroño, Amaia Castro, ha presentado este lunes un balance de este programa, que cuenta con dos asociaciones autorizadas para la gestión de dichas colonias: APA Rioja y la Asociación Colonias Felinas. Este programa, ha explicado, incide en la necesidad de establecer una colaboración permanente entre el Ayuntamiento de Logroño y las asociaciones de protección de los animales que gestionan y cuidan las colonias felinas.
Ha indicado que el seguimiento y la supervisión de las colonias es “vital” para saber si se incorporan nuevos ejemplares sin esterilizar que pueden iniciar el ciclo productivo y, como consecuencia, “descontrolar la gestión de la colonia”. Por ello, ha señalado que las colonias se registran de forma constante y el Consistorio logroñés elabora una base de datos de seguimiento de las mismas en la ciudad.
En este sentido, ha recordado que la gestión de los animales que se encuentran en los municipios es competencia de los diferentes ayuntamientos, además de que la Ley de Protección de los Animales de la Comunidad Autónoma de La Rioja habilita a los municipios para la gestión de las colonias felinas urbanas mediante el método CES-R, que consiste en capturar, esterilizar y retornar.
Ha explicado que el Método CES-R (Captura, Esterilización y Suelta-Retorno) es el control recomendado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y su desarrollo “óptimo” consiste en la captura de todos o al menos el 70 por ciento de los gatos de una colonia, esterilizarlos, desparasitarlos y devolverlos a su territorio marcados para llevar un control de cada animal.“Logroño está cada vez más cerca de lograr ese objetivo del 70 % de esterilizaciones recomendado por la OMS”, ha subrayado Castro.
Asimismo, otros objetivos de este programa municipal son mejorar la calidad de vida de los gatos mediante el suministro de comida específica, agua y refugio.
Ha informado que los ciudadanos no deben echar restos de comida a las colonias porque generan malos olores, insectos y plagas “que ponen en peligro la salud de los gatos y contribuyen a la generación de posibles focos de infección para las personas”.
Las colonias, ha apuntado, deben ser alimentadas con comida específica para gatos, que sólo podrán ser suministrada por las personas autorizadas para ello.
El resto de puntos de este programa son disminuir los problemas de superpoblación mediante la esterilización y la gestión de la adopción de los animales sociables; generar beneficios en la convivencia pacífica, procurando una adecuada integración en la ciudad; llevar a cabo un control sanitario de las mismas para evitar posibles problemas, como la zoonosis; y disponer de un censo de colonias felinas y del número de ejemplares.
Por otra parte, la concejala ha explicado que las personas que quieran colaborar con este programa pueden hacerlo convirtiéndose en personal voluntario en la gestión de las colonias, capturas y traslados de los animales que lo precisen.
También pueden participar en actos que se organizan para la difusión de estas actividades; facilitae casas de acogida para los cachorros o adultos sociables que pueden rescatarse de las colonias; adoptae esos animales; o donar alimentos, casetas o medicamentos.
