Parecen recomendaciones de sentido común, pero son imprescindibles para no tener sustos durante las olas de calor. Con los mercurios marcando máximos que rondan los 40 grados y las mínimas que no bajan de los 20, el Servicio Riojano de Salud es claro al respecto: entre otras recomendaciones hay que evitar determinadas actividades que de otra forma son comunes en nuestro día a día. Una de ellas hacer deporte en la calle. De ahí vienen los principales problemas que se encuentran tanto en Atención Primaria como en los hospitales riojanos durante los días en los que el mapa de temperaturas está al rojo vivo.
Eva Martínez, jefa de epidemiología de Salud Pública, explica que “con estas temperaturas hay que evitar hacer deporte en la calle”. El deporte es un gran aliado para la salud física, pero puede suponer un riesgo ante las altas temperaturas. Martínez recomienda hacer deporte por la noche y, si es posible, utilizar para este tipo de actividades las primeras hora del día.
En la última ola de calor del mes que se vivió en La Rioja a mediados de junio, treinta personas tuvieron que ser atendidas por situaciones relacionadas con las altas temperaturas. “Desde el 1 de junio hasta ahora en Atención Primaria hemos tenido que atender a unas treintena de personas con casos directamente relacionados con el calor”.
“En su mayoría eran personas que estaban haciendo ejercicio en la calle a horas intempestivas para estos días de calor extremo. De esos treinta casos, cinco han necesitado de atención hospitalaria y al menos dos de ellos han precisado de ingreso posterior”, detalla.
Según la investigación ‘Mortalidad atribuible a las temperaturas extremas’ en España, de la Universidad Carlos III de Madrid, en el pasado mes de junio, diez personas fallecieron por estos motivos en La Rioja. Eva Martínez explica que realmente la situación no es del todo real.
“El estudio es una estimación estadística que luego hay que contrastarla con los datos que tenemos en los hospitales. De momento, en La Rioja, este año no nos consta ninguna muerte relacionada con estas situaciones de altas temperaturas”. Aún así hay que tener muy en cuenta las recomendaciones que se lanzan desde los servicios médicos.
“En las horas centrales del día debemos evitar incluso salir de casa, como mucho ir a la piscina y estar el máximo tiempo posible a la sombra”, cuenta. Pero no todo el mundo puede hacerlo así. Son muchos los trabajadores que tienen que sobrellevar estos días compaginándolos con sus empleos en plena calle.
“En esos casos en los que no es posible estar en casa o en sitios refrigerados hay que intentar utilizar prendas de vestir flojas, cubrirse la cabeza con viseras o sombreros, e hidratarse continuamente, incluso hacer descansos para poder estar el menor tiempo posible al sol”, detalla.
Salir a la calle en plena ola de calor puede suponer un riesgo para la salud, especialmente en las horas centrales del día. El sol incide de manera vertical, ha incidido durante buena parte del día en el suelo y la temperatura ambiental es muy alta. Ante la necesidad de hacer recados o cumplir con tareas como hacer la compra, es mejor optar por las primeras horas del día.
Otra de las recomendaciones que hace es “hidratarnos antes incluso de tener sed, no nos valen las bebidas alcohólicas porque aumentan las posibilidades de deshidratación”, explica. “Cuando tienes sed es que ya estás deshidratado”, aclara.
Los efectos son más nocivos para personas vulnerables: tanto los niños como las personas mayores tienen menos reservas hídricas en el cuerpo y es más sencillo que se deshidraten si no beben agua. La mejor opción es beberla de forma continuada para que el riñón no deseche parte de la misma, que es lo que sucede si bebemos mucha agua de una sola vez. Esta es la manera más rápida de regular la temperatura del cuerpo.
EFE/Raquel Manzanares
Por otro lado, la especialista asegura que es importante durante estos días “no realizar comidas copiosas, es mejor comer más veces al día pero menos cantidades”. La digestión es un esfuerzo físico en el que el cuerpo pierde mucha energía. “Lo mejor estos días es comer ensaladas, frutas, verduras o zumos que tienen vitaminas, hidratos y agua”, dice apostando así por las dietas equilibradas.
Además hay que estar muy pendientes de nuestro cuerpo. “Si empezamos a tener dolor de cabeza, sudoración, cansancio, lo mejor es beber agua de manera continuada o incluso humedecerse o ponerse paños húmedos”, cuenta. En el caso de que los síntomas vayan a más con fiebre o enrojecimiento de la piel hay que llamar al 112 para que un médico determine la gravedad de cada caso.
El Ministerio de Sanidad recomienda acudir a un centro de salud u hospital ante síntomas que se mantengan durante más de una hora y que puedan haber sido provocados por las altas temperaturas. Los síntomas relacionados con un golpe de calor son la astenia, fatiga que se convierte en malestar, los mareos, los vómitos e incluso la fiebre y recuerda que estos síntomas pueden manifestarse a los dos o tres días de que una persona haya estado expuesta al calor.
