La Dirección General de Biodiversidad del Gobierno regional colabora con el Centro de Investigación Biomédica de La Rioja (CIBIR) en el estudio de los patógenos que puedan portar las aves migratorias.
El consejero de Sostenibilidad y Transición Ecológica, Álex Dorado Nájera; el director general de Biodiversidad del Gobierno de La Rioja, José Luis Rubio, y el alcalde de Santa Eulalia Bajera, José Miguel Cervel, han participado este domingo, Día Mundial del Medio Ambiente, en una actividad de anillamiento científico para hacer seguimiento poblacional de aves migratorias y de toma de muestras biológicas celebrada entre Santa Eulalia Bajera y Santa Eulalia Somera.
“Uno de los problemas que acarrea la crisis de biodiversidad y el cambio climático es su repercusión en la propagación de enfermedades y en la salud humana, y este tipo de seguimientos en aves es una forma de prevención y sirve para conocer su alcance potencial”, ha señalado el consejero.
Este tipo de actividades de seguimiento y control de las aves migratorias, enmarcado en el programa Estaciones para la Monitorización de Aves Nidificantes (EMAN), ayuda a conocer el estado de sus poblaciones y a detectar amenazas para su conservación.
También contribuye a tener una alerta temprana del tipo de patógenos que pueden portar, bien a través de parásitos como la garrapata, que actúan como vectores de transmisión de patógenos, o porque el propio animal pueda estar infectado. De los ejemplares capturados, tras su anillación, se obtienen ejemplares de los parásitos que puedan portar y muestras fisiológicas del animal para conocer qué enfermedades les afectan.
La jornada de anillamiento científico de aves se ha desarrollado en una zona de ribera entre Santa Eulalia Somera y Santa Eulalia Bajera, donde la instalación de las trampas de captura se efectuó prácticamente a oscuras, quedando todo listo instantes antes del amanecer.
Las capturas no han tardado en producirse y han sido anilladas aves, pertenecientes a una decena de especies distintas, todas ellas representativas de la zona, como el verderejo, el verderón, el cetia ruiseñor, el tuercecuellos, la curruca cabecinegra, el mirlo o la abubilla.
Esta ha sido una actividad abierta de educación ambiental en la que los participantes han podido aprender las claves para saber si un ave es migratoria, macho o hembra, su edad, si está incubando o cuenta ya con polluelos. Además, se han realizado mediciones de las plumas, se ha visto cómo era su pico y, por lo tanto, su alimentación.
Si el pico es alargado, comen insectos, y si es más ancho, semillas y granos. También se han hecho mediciones del peso de las aves que, en muchos casos, sin llegar a los 20 gramos, son capaces de ir y volver a África y, en ambos sitios, encontrar el mismo lugar para vivir.
El anillamiento es una herramienta científica cuyo propósito principal es obtener información sobre la biología y ecología de las aves, así como las rutas migratorias, los tamaños y tendencias poblacionales, si se dispersan o se quedan siempre en el mismo lugar o su longevidad, y es utilizada por técnicos para la conservación y gestión de la biodiversidad.
Consiste en la colocación de una anilla metálica en la pata del ave en la que se encuentra inscrito un remite que indica el país dónde se ha anillado y un número único, lo que permite individualizar al ave.
Por lo tanto, es una marca única, un DNI del ave con la que se va escribiendo su historia al recuperarla con su anilla en distintos momentos o lugares. Este domingo se celebra el Día Mundial del Medio Ambiente, una cita con la que Naciones Unidas quiere este año poner en evidencia que la Tierra se enfrenta a una triple emergencia ambiental: la crisis climática, la pérdida de biodiversidad y la contaminación, que son problemas que continúan afectando al aire, la tierra y el agua.
Bajo el lema ‘Tenemos una sola Tierra’ #UnaSolaTierra se celebra este año el Día Mundial del Medio Ambiente en el que se pretende concienciar sobre estas tres crisis, a la vez que se anima y fomenta la celebración, protección y restauración del planeta a través de diversas actividades transformadoras.
La Consejería de Sostenibilidad, Transición Ecológica y Portavocía del Gobierno ha organizado diversas actividades para conmemorar este día en contacto con la naturaleza y para sensibilizar al público sobre la necesidad de transformar la sociedad para hacerla más inclusiva, más justa y más respetuosa con el medio ambiente.
Todas las iniciativas serán compartidas por los centros para la reflexión colectiva al día siguiente de su celebración a través de CEHS y de la red estatal ESenRed en un mapa interactivo, que estará disponible durante los próximos meses para que los centros educativos los puedan compartir en redes y difundir entre la comunidad educativa.
