La invasión de Ucrania y las medidas adoptadas contra Rusia están poniendo de manifiesto la frágil posición de la Unión Europea en el abastecimiento de una de sus fuentes de energía: el gas natural. Las amenazas del Kremlin sobre paralizar el suministro de gas a Europa están llevando a los líderes europeos a plantearse la necesidad de reducir la dependencia del gas ruso.
Diversificar las fuentes de aprovisionamiento de gas pasa por una combinación de tres opciones básicas: aumentar la producción interna, incrementar las importaciones por gasoducto desde otras regiones o potenciar el gas natural licuado como fuente alternativa de suministro.
Para ello, España podría ser una pieza clave para respaldar al suministro de gas en Europa. El excedente contratado para las plantas regasificadoras en nuestro país es hoy reexportado a otras regiones del mundo a buen precio, pero podría servir como una fuente muy importante de respaldo al suministro de Europa. El principal obstáculo a este mecanismo reside en la escasa capacidad de interconexión gasista con Francia. Una de las pocas soluciones actuales a este problema parte de Calahorra.
El gasoducto que atraviesa el puerto de Larrau y que está bombeando gas al límite de su capacidad a Francia desde abril y lo seguirá haciendo en las próximas semanas, nace en la capital riojabajeña. Ésta es, en estos momentos, una de las dos únicas interconexiones entre Francia y España (la otra pasa por Irún) y se han convertido en estratégicas para intentar paliar desde la península ibérica la creciente demanda europea de gas por las restricciones de suministro desde Rusia. Sin embargo, la capacidad de estas dos infraestructuras es bastante limitada, sobre todo, si de lo que se trata es de suplir el suministro ruso en Europa.
Las interconexiones de Larrau (que parte de Calahorra y que se puso en funcionamiento en 1993) e Irún están bombeando 225 Gigavatios por hora al día, lo máximo posible. Entre las dos tuberías suman una capacidad conjunta de 7.400 millones de metros cúbicos al año, lo que equivale a más de siete barcos de gas natural licuado al mes. No obstante, de los dos gaseoductos, es el que atraviesa Navarra desde Calahorra para salir por Salazar hacia Larrau (Francia) el de mayor capacidad con 5,3 kilómetros cúbicos de gas natural.
