Convivir en pareja no es tarea fácil si las obligaciones profesionales y familiares han de conjugarse con tareas relacionadas con el mantenimiento de un hogar. Tras un largo día, encontrar un espacio limpio, ordenado y acogedor puede ser una sensación gratificante para muchas personas. No obstante, hacer esto realidad puede provocar un verdadero cisma en la vida sentimental de la población.
Y es que el 61 % de las parejas en La Rioja reconocen tener discusiones cuando realizan tareas de bricolaje o de mejoras en el hogar, según el informe elaborado por la plataforma TaskRabbit sobre la relación entre las tareas ‘hazlo tú mismo’ y las relaciones de pareja en España.
De ellas, el 52 por ciento de los encuestados afirma que estas peleas no trascienden más allá de una fricción momentánea, pero el 18 por ciento reconoce haber pasado más de un día sin hablarse y otro 18 % incluso se ha planteado romper o divorciarse por las disputas de este tipo.
El informe identifica las cinco tareas que más discusiones provocan entre las parejas de La Rioja, entre las que reina la pintura de paredes (43 por ciento de los conflictos). Montar muebles, colgar cortinas o lámparas y las tareas de jardinería son otros de los puntos de fricción.
Evitar el conflicto
Para evitar discusiones, el 32 % de los riojanos evita deliberadamente hablar de las tareas de mantenimiento del hogar para no discutir y el 29 % afirma haber arreglado a escondidas una chapuza de su pareja. Destaca asimismo el 41 % de los riojanos que reconoce haber elogiado una de estas tareas realizada por su pareja para evitar discusiones, a pesar de no estar contento con el resultado.
Esperanza Martínez, psicóloga sanitaria, explica que “en la pareja, el bricolaje y las tareas del hogar pueden ser una fuente de estrés y peleas. En esos momentos, pueden salir a relucir las peores partes de nuestra personalidad, lo que provoca enfrentamientos y decepciones”. “Esto aumenta especialmente cuando una de las partes de la pareja no ha vivido antes de forma independiente y no tiene la costumbre de gestionar ciertas tareas”, añade, subrayando que “pasar tiempo de calidad con la pareja es esencial y si el tiempo dedicado a colocar las estanterías o a limpiar los armarios es una fuente de disputas, delegar es la clave”.
