Aunque el mercado de las criptomonedas sufrió un severo correctivo desde que a mediados de abril bitcoin empezase una corrección a la baja y esta parece que ya se ha revertido en parte, lo cierto es que si se analiza la cotización de las criptomonedas desde que aparecieron este mercado ha crecido mucho más de lo que ha retrocedido.
Sin embargo esto no quiere decir ni que todas las criptomonedas hayan sido exitosas -muchas ya han desaparecido, bien porque eran proyectos inviables, porque no despertaron el interés necesario o simplemente porque su intención era la de reunir el dinero de los inversores para luego desaparecer con él- ni que todos los que hayan invertido en criptomonedas hayan logrado siquiera mantener su inversión, ya que entrar en el pico de la cotización suele ser un mal negocio. Aun así, si se quiere operar de la forma más segura, siempre se pueden tomar algunas medidas.
Comprar criptomonedas listadas en plataformas fiables
No existe ningún activo que garantice que vaya a mantener su valor con el tiempo, aunque se llame dólar y esté respaldado por la Reserva Federal, ya que nada está a salvo de la entropía y con el paso de los eones hasta las Pirámides de Giza serán polvo y no vivirán ni en el recuerdo, pero siempre es mejor comprar activos que hayan demostrado un alto grado de aceptación y hacerlo en plataformas fiables.
Por ejemplo, comprar bitcoin en Skrill será una opción de lo más segura posible, mientras que comprar esa misma criptomoneda en una dudosa exchange de nueva aparición, por atractivas que sean sus comisiones, puede suponer un riesgo innecesario, más si se tiene en cuenta que cuando una de estas empresas desaparece las criptomonedas sustraídas son muy difíciles, por no decir imposibles, de recuperar.
¿Cómo se puede empezar a operar con una plataforma segura como es la inglesa Skrill? Lo primero que se debe tener en cuenta es que si ya se es cliente de Skrill no será necesario abrir una cuenta nueva para operar con criptomonedas exclusivamente, si ya se tiene una cuenta para enviar o recibir dinero fiat ya se podrá empezar a comprar criptomonedas, y si además ya se tiene algo de dinero en la cuenta no será necesario utilizar ninguna de la multitud de formas de depósito que Skrill ofrece para empezar a comerciar.
En cualquier caso, una vez se tenga algo de líquido en la cuenta sólo habrá que seguir una serie de sencillos pasos; en la derecha de la pantalla habrá que pulsar en el apartado “Criptomoneda”, elegir la moneda que se quiere comprar, pulsar el botón “Exchange now”, seleccionar la cantidad que se quiere comprar (muchas criptomonedas se pueden comprar por fracciones, no hace falta comprar un bitcoin, un litecoin o un ethereum completo), comprobar que todo está correcto y confirmar.
Como se ha visto, convertirse en poseedor de criptomonedas es rápido y sencillo, y adicionalmente Skrill ofrece un servicio de custodia, lo cual quiere decir que no es necesario que el usuario guarde bajo su responsabilidad complicadas claves, pero de lo que nunca se está a salvo es de la volatilidad, y por seguras que estén las criptomonedas nadie garantiza que el precio se mantenga o suba, así que es aconsejable comprar con dinero del que se pueda prescindir, al menos en el corto y medio plazo, y comprar criptomonedas que se hayan estudiado adecuadamente y tener en cuenta que aunque un valor tan popular como bitcoin llegó a superar los 60.000 dólares, en este momento se mueve en el entorno de los 50.000 dólares.
¿Qué va a ser del precio de bitcoin?
Evidentemente nadie lo sabe, y si se busca un poco se encontrarán opiniones de personas de gran erudición que dicen una cosa y personas no menos inteligentes que dicen lo contrario, unos que hace meses eran fervientes defensores ahora las aborrecen, y los que hace no mucho las perseguían con sus opiniones y análisis ahora parecen haberse caído del caballo como San Pablo y ahora son criptocreyentes. Nadie sabe a ciencia cierta qué va a ocurrir, ni siquiera la próxima hora, pero si algo es cierto es que las criptomonedas han despertado mucho interés, de hecho no hace falta más que ver como tantos estados se plantean la creación de sus propias criptomonedas estatales.
