Este martes sería una jornada de preparativos en Calahorra. Las peñas ya lo tendrían todo organizado, las reinas contendrían sus nervios de cara a uno de los días más especiales del año y el resto de calagurritanos estarían ya con su ropa blanca preparada y las fuerzas guardadas para los siete próximos días. Sin embargo, por segundo año consecutivo, Calahorra no vivirá sus festejos de verano en honor a San Emeterio y San Celedonio.
El ayuntamiento decidió el pasado mes de junio suspender las fiestas. Aunque en un principio las peñas habían preferido esperar para tomar la decisión, la realidad es que sólo dos de ellas han previsto actos para este última semana de agosto. Sólo La Moza y la Calagurritana tienen planteadas actividades: un concierto, varios vermús musicales y un acto para los más pequeños de la casa. Poco más. El resto ha decidido aguardar y poner el punto de mira en marzo de 2022.
Por parte del ayuntamiento tampoco se realizarán actos extraordinarios fuera de los que se están llevando a cabo en la época estival. “La programación es la misma que venimos realizando a lo largo de todo el verano gracias a Bimilenaria Cultural”, ha comentado la alcaldesa Elisa Garrido esta misma tarde.
Con respecto al posible dispositivo que este miércoles pudiese haber en la glorieta de Quintiliano, ha explicado que está previsto que haya lo mismo que el año pasado y que se refuerce algo de cara al fin de semana. “Pero como se viene haciendo también durante otras semanas del verano”. Garrido confía en la responsabilidad de la población calagurritana. “Mucha gente está trabajando o se ha ido de vacaciones”.
Lo único que será diferente a lo largo de la semana será la colocación de la feria en el aparcamiento de la Era Alta, que estará en la ciudad durante tres semanas con todos los protocolos previstos para este tipo de instalaciones. Además, los días 30 y 31 habrá actos religiosos.
El primero será en la víspera del día grande cuando se podrá ‘pasar’ a los más pequeños por las reliquias de los Santos Patronos. Una costumbre que se lleva a cabo siempre en la plaza del Raso durante la procesión y que, sin embargo, se ha sacado de ella para evitar aglomeraciones. Una treintena de niños están apuntados hasta el momento para participar en el acto.
Por último, habrá procesión en coche. Las reliquias de los dos santos pasearán por toda la ciudad para que los calagurritanos puedan contemplarlas y pedir que en marzo de 2022 las cosas hayan cambiado lo suficiente como para poder celebrar unas fiestas por todo lo alto.
