La maquilladora profesional Eva Amigo nació en Burgos en 1975, pero se mudó a Logroño con tan solo dos años. Trabaja en publicidad, cine y eventos y, aunque ha vivido durante muchos años en Madrid, siempre que vuelve a La Rioja se siente como en casa. Actualmente, ha regresado a Logroño, la ciudad donde creció.
– ¿Cómo ha llegado a ser maquilladora?
– Llevo trabajando como maquilladora más de 20 años, estudié peluquería en el Colegio Adoratrices de Logroño, pero después de trabajar en un evento con una marca de maquillaje cambiando los looks de las modelos, me di cuenta de que me gustaba mucho el maquillaje. Siempre me ha encantado la estética y lo visual, y si tengo que escoger me quedo con el maquillaje. Elegí este trabajo porque me gusta mucho el estilo de vida, no tiene nada de monótono, cambias mucho de gente, de equipos, de localizaciones… Está guay poder trabajar en zapatillas y tener esa libertad.
– El mundo del maquillaje es muy amplio, ¿en qué proyectos participa?
– Lo que más hago es publicidad y cine de forma puntual, me gusta mucho hacer spots publicitarios porque son proyectos muy cortos y como soy una persona muy inquieta me lo paso muy bien. El cine también me encanta, se crea un ‘gran hermano’ porque trabajas con un equipo muy grande durante meses y creas vínculos muy chulos. El resultado de ver una película en una pantalla grande es muy romántico y bonito, porque es cierto que a veces los anuncios publicitarios pueden resultar más fríos y no me llegan tanto, pero casi siempre son proyectos muy bonitos.
– ¿Cuáles han sido esos proyectos que le han marcado?
– Me encantó trabajar en ‘Teresa’ una película de Jorge Dorado sobre Santa Teresa de Jesús, es un director que admiro y el rodaje fue increíble. El equipo fue muy armonioso y siempre que nos juntamos los de maquillaje y peluquería que trabajamos ahí decimos que tendríamos que hacer una ‘Teresa’ al año. Fue muy armónico todo, aunque trabajásemos desde muy pronto hasta la noche, el ambiente que hubo fue maravilloso. En publicidad, los dos spots en los que más me ha gustado participar han sido ‘El bar de Antonio’ para la lotería de Navidad de 2014 y ‘Mi pequeña’ de Aegon Seguros de 2103, en el que grabamos con una niña de cuatro años. De todos los proyectos que hago siempre me quedo con personas y con momentos. El último año estuve trabajando en una película de Daniel Guzmán, aunque aún no se sabe el título, y más de lo mismo, fue una experiencia muy chula.
– ¿Considera que trabajar en el mundo del maquillaje es difícil?
– Si dijera que este mundo es fácil, estaría mintiendo, pero imposible no hay nada. No vengo de una saga familiar de maquilladores ni tenía amigos que trabajaran en el cine, por eso mucha gente me decía que no trabajase de esto porque era muy difícil. Un amigo me dijo que “hay mucha gente que se queda en el camino'” y me quedé con eso, porque me quedo siempre con lo positivo. Trabajando con una buena actitud y ganas es como se llega lejos. Hay que hacer un buen equipo, poner lo mejor de ti y cuidar a las personas, es importante lo humano porque invades el espacio personal de la gente. Hice cositas pequeñas en cortometrajes, trabajé con fotógrafos y modelos como intercambio de material y acabé trabajando con mi hermana Laura en el ‘late night’ de Dani Mateo ‘La noche sin tregua’. La vida me ha ido llevando, no soy una persona muy ambiciosa con metas fijadas, llámalo suerte o recoger lo que siembras, son regalos que te da la vida cuando llevas ya una trayectoria.
– Muchas veces el trabajo de una maquilladora acaba siendo infravalorado, ¿no cree?
– De cara a las personas que ven cine, pero que no están en el mundillo, es cierto que no le dan demasiada importancia si está bien hecho. Todos los departamentos son importantes y no se puede menospreciar ninguno, porque cuando salen las cosas bien la gente no se da cuenta del trabajo que hay detrás. No lo valoran mucho, pero si está mal, te crucifican por ello. Hay que estar muy pendientes de todo para que no haya fallos de raccord cuando se repiten escenas después de un tiempo y eso es un trabajo complicado. Entiendo que la gente no lo valore tanto y, en parte, me quita algo de presión. Me gusta mucho la película de Isabel Coixet ‘Mi vida sin mí’, porque es muy natural y no se nota casi nada el maquillaje, parece que no han hecho nada y eso es muy difícil. Desde luego yo soy de menos es más, incluso para la calle, me gusta lo natural.
– ¿Qué es lo que más disfruta a la hora de trabajar?
– Son muchas cosas, me encanta leerme el guion e imaginarme a los personajes en la cabeza y compararlos luego con el listado real de actores. Hacer las primeras pruebas con el director es algo muy guay, bueno me gusta todo el proceso. Quizás lo que menos es el momento del rodaje porque hay que estar continuamente retocando y pendiente de todo para que no griten: “¡Maquillaje!”. El trato con las personas, conocer a gente nueva y a gente joven, es algo que me encanta.
– ¿Tiene mucha libertad a la hora de maquillar a los actores?
– Por lo general hay que seguir unas pautas, pero si te han cogido es porque les gusta tu estilo. Es cierto que algún realizador es muy estricto y si te sales un poco del guion lo rechazan, porque hay gente que prefiere que parezca que no han pasado por mis manos. En algún proyecto he tenido rienda suelta y está genial hacer de vez en cuando algo un poco más loco porque me divierto mucho. La estética de la serie ‘Euphoria’ me encanta, maquillajes llenos de brillo y un poco de fantasía, por eso cuando trabajo con modelos para fotografía pruebo muchas cosas porque les puedes hacer cualquier cosa y les queda genial.
– Supongo que habrá conocido a personas importantes, ¿con quién le ha gustado más trabajar?
– Lo más reciente, ha sido en la película de Daniel Guzmán en la que estaba trabajando Luis Tosar. No lo conocía personalmente, y es una pasada de persona. Me daba esa sensación de que era majo, pero es paciente, encantador y buen conversador, ha sido un gustado conocerle y trabajar con él durante 3 meses. Era un gusto verle llegar por la mañana a la caravana. Un día le dije: “Mi madre te manda saludos porque eres muy majo y eso se te ve en los ojos”. Y eso es cierto, es una persona muy natural y un encanto.
