La directora de Enfermería de Atención Primaria y 061 del Área de Salud de La Rioja, Noemí Marauri, ha presentado este jueves su dimisión. En plena polémica por el Plan de Atención Continuada, abandonaría la Consejería de Salud aunque ella misma asegura estar de vacaciones. Podría no ser la última salida, ya que los ánimos están cada vez más caldeados en este departamento aunque nada tenga que ver con ello el calor que azota estos días a la comunidad.
En este sentido, todo apunta a que podrían salir la gerente de Atención Primaria, Paula Guerrero, y el director médico, Rafael Crespo. NueveCuatroUno ha podido confirmar que estas tres personas han presentado su dimisión, pero una reunión a última hora de este jueves ha intentado apaciguar la situación creada en el seno del SERIS a raíz del Plan de Atención Continuada.
Por tanto, a pesar de haber registrado sus renuncias, estas no se han hecho oficiales a la espera de ver qué ocurre finalmente con el Plan de Atención Continuada y con las decisiones de los tres directores sanitarios. De hecho, entre los alcaldes de los municipios más afectados por el mismo cunde el desconcierto porque no saben qué grado de cumplimiento habrá del mismo. Tudelilla y El Villar de Arnedo, por ejemplo, ya han explicado a sus vecinos que no contarán con médico la próxima semana.
Marauri fue nombrada en diciembre de 2019 para el área que dirige el gerente del SERIS, Alberto Lafuente, hasta entonces había trabajado en distintos equipos de Atención Primaria del Servicio Riojano de Salud (desde 1999). Considerada por los profesionales como una de las ideólogas del Plan de Atención Continuada, junto a los altos cargos de Salud, en los últimos días varias voces habían solicitado su dimisión al igual que la de Paula Guerrero y Rafael Crespo.
“Llegados a este punto queremos que el plan fenezca como un mal sueño de verano y no queden de él ni las cenizas… pedimos la dimisión de los insensibles, arrogantes y realmente responsables de intentar poner en marcha un plan guardado en un cajón de la Gerencia”, criticaban esta semana algunos profesionales.
Crisis sanitaria
Ahora que la pandemia comienza a llegar a su fin, aunque todavía sigue presente en el día a día de los riojanos, salen a la luz los desencuentros de gestión en la Consejería de Salud. En el ‘pequeño Logroño del poder’ lleva días rumoreándose una posible salida de la consejera y portavoz, Sara Alba, en una nueva crisis de gobierno que se produciría antes de llegar al mes de agosto.
En las últimas semanas ha cobrado especial protagonismo en las decisiones más relevantes el doctor Alberto Lafuente, desplazando en Salud como persona de confianza de la presidenta Concha Andreu a la propia Sara Alba. Juego de sillas en un departamento de vital importancia durante el último año y medio, pero que se ha visto dinamitado por ver la luz al final del túnel y un Plan de Atención Continuada que nació sin consenso ni diálogo con los afectados por los primeros recortes anunciados.
Pese a revertir la decisión de cerrar las urgencias en varios municipios y contratar a cuatro médicos para reforzar la asistencia sanitaria en toda la región, ya no hay quien pare las luchas internas y los desencuentros en el Ejecutivo.
Otras dimisiones
La revolución en la estructura interna del Servicio Riojano de Salud (SERIS) no hizo sino comenzar en abril con los nombramientos de Paula Guerrero al frente de Atención Primaria (solo seis días después de haber encomendado el cargo a Rosa Garrido) en sustitución de Carlos Zapiola (dimitido en febrero) y de Rafael Crespo como director médico de Primaria.
El pasado mes de mayo, dimitieron el número dos del SERIS, el doctor Francisco Antón (director adjunto a la Gerencia), y el máximo responsable ejecutivo de la asistencia hospitalaria, el doctor Javier Pinilla (director de Asistencia Sanitaria).
En septiembre, Salud aprobó el nombramiento de Rubén Vinagre, hasta entonces jefe de Gabinete de la Consejería, como nuevo subdirector general de Coordinación Sociosanitaria y Cuidados. Vinagre tomaba así el relevo del doctor Jorge Mínguez, que renunció por motivos personales. Mínguez era uno de los hombres de confianza del doctor Enrique Ramalle, exdirector general de Salud Pública, Consumo y Cuidados, quien presentó su dimisión por motivos personales una semana antes.
