“Mal, fatal, esto es una locura. Todo, todo, todo anegado”. Así describe Ignacio López, concejal y teniente alcalde del Ayuntamiento de Fuenmayor, la situación de la localidad después de más de una hora cayendo agua “como nunca habíamos visto, con tanta virulencia y tanto tiempo”.
López describe que el río está totalmente desbordado e incluso “se está llevando un parque por delante”. Además, las piscinas municipales han desaparecido bajo litros de agua embarrada. “No se ve ni las propias piscinas ni el césped y el cuarto de máquinas está de agua hasta arriba. Va a ser imposible salvar los motores”.
El propio consistorio se ha puesto en contacto con los bomberos pero “están saturados y no saben cuándo podrán llegar hasta aquí”. El concejal ha atendido a NueveCuatroUno desde el teatro de Fuenmayor “donde está entrando agua sin parar por todas partes. Llego ahora de la biblioteca, también inundada, en la que hemos estado salvando libros como hemos podido”.
En las calles, los contenedores soterrados no han aguantado la presión y, tal y como ha confirmado López, “las tapas han saltado por los aires”. Los garajes también han quedado ‘sumergidos’ y muchos vecinos “se encuentran ahora achicando agua incluso de las casas”.
El edil no recuerda una jornada como la de este lunes y “los más ancianos del lugar tienen que remontarse muchos años atrás para recordar algo parecido, pero ni por asomo igual. Ahora mismo Fuenmayor es zona catastrófica y, o viene alguien a echarnos una mano o aquí tenemos un problema muy importante”.
Por el momento es imposible hacer una evaluación de los daños, ni en el municipio ni en el campo, “pero he hablado con diferentes agricultores y me han dicho que varios caminos han desaparecido bajo el agua”. López señala que el alcalde, Alberto Peso, “está de un lado para otro con su todoterreno ayudando en todo lo que puede a los vecino y yo, voy a reunirme con los alguaciles para, con un par de bombas que tenemos, achicar agua”.
