El pleno del Ayuntamiento de Calahorra ha aprobado, de manera inicial, la modificación de los terrenos del antiguo trujal para poder utilizarlos en la ampliación del Centro de Salud, inaugurado en los años 80. Así, se inicia el trámite para que los terrenos, que pertenecen a la cooperativa Santos Mártires, cambien y pasen a tener una calificación de equipamiento público para uso sanitario y así poder adquirirlo y cederlos a la consejería para la ampliación.
Fue el pasado mes de marzo cuando la consejería, a través de la gerencia del SERIS, se puso en contacto con el ayuntamiento de Calahorra para solicitarle la posibilidad de contar con terrenos para la ampliación del Centro de Salud en el que determinados servicios se han quedado pequeños y necesita una urgente ampliación.
De esta manera, el ayuntamiento comenzó las conversaciones con la cooperativa Santos Mártires, dueña de un terreno contiguo al centro que dispone de 1.100 metros cuadrados; lo que supondría casi duplicar la capacidad del centro en la actualidad.
“Se han estudiado varias opciones como fue la permuta con otros terrenos mayores con los que cuenta el consistorio pero a la cooperativa no le pareció adecuado”, comentaba en el Pleno Rebeca Sáenz, edil de Urbanismo. De esta manera los técnicos del consistorio valoraron en 30 euros el metro cuadrado de las instalaciones por considerar que está en ruinas mientras que la cooperativa ha puesto encima de la mesa un precio que ronda los 400 euros por metro cuadrado. Ante la situación de falta de acuerdo, “y siempre con un tono muy cordial”, se le he trasladado a la cooperativa la decisión de pasar por la expropiación. “Ellos se muestran satisfechos en el objetivo final que es que la ampliación del centro pase por la compra de sus terrenos y nosotros creemos que la expropiación es la mejor forma de llegar a un acuerdo justo para las dos partes”.
Uno de los puntos más importantes del Pleno se saldó con los votos favorables del PSOE y de Izquierda Unida y las abstenciones del resto de grupos de la oposición. Para VOX, la principal motivación para no votar a favor fue la cuestión de fondo sobre la forma de adquirir los terrenos, “es posible que la premura que se ha tenido para traer este expediente al Pleno haga que se termine en un largo expediente judicial que no favorece que la ampliación pueda hacerse de forma rápida”, explicó su concejal Maite Arnedo.
En la misma línea se posicionó Cristina Moreno de Ciudadanos que se mostraba en contra de la forma de hacerse con los terrenos. “No nos parece un precio justo para la cooperativa que se haya propuesto adquirir los terrenos por 28.000 euros” y solicitaba así llegar a un acuerdo más beneficioso para la entidad.
Desde Izquierda Unida, Óscar Moreno, que votó a favor del cambio de calificación de los terrenos. “De momento hagamos el cambio de calificación para que el consistorio pueda hacerse con esos terrenos y cederlos a la consejería y luego ya veremos cual es el paso siguiente”.
Por su parte, Luis Martínez Portillo solicitaba ser más ambicioso en este asunto. “Hay que mirar el crecimiento de la ciudad en los próximos años y para nosotros la mejor opción sería plantear la creación de un nuevo Centro de Salud en otra ubicación que cuente con las necesidades futuras del mismo”. “Es innecesario que el ayuntamiento tenga un enfrentamiento con la cooperativa por ese motivo”, señaló.
Sobre la posibilidad de un enfrentamiento, la alcaldesa tomó la palabra para explicar que “ellos en ningún momento se han negado a que la ampliación se haga en los terrenos que son de su propiedad, al contrario desde la primera reunión han manifestado que es una decisión adecuada, se han explorado opciones, se han visto la tasación de los técnicos, ese precio no le parece adecuado a la cooperativa y por eso se ha decidido la posibilidad de que sea a través de que un juez determine cual es el precio de ese terreno, esperamos llegar a un acuerdo satisfactorio con los dueños de los terrenos”.
