La situación en las residencias de mayores se ha agravado este miércoles: 83 casos activos de COVID-19 (quince más que el martes). Actualmente, hay 25 centros libres del virus y siete con casos (uno más que el día anterior). El consejero de Servicios Sociales, Pablo Rubio, ha indicado que durante las últimas semanas se había mantenido una situación contenida en cifras, pero que en los últimos días se han incrementado.
Rubio ha hecho hincapié en que los contagios en estos centros se deben al contacto entre cuidadores y personas mayores, ya que las visitas siguen suspendidas. “El personal vive en sus propios domicilios y tiene un riesgo de contagio elevado. Cuando se produce la entrada de cuidadores, hay un riesgo que se debe intentar limitar aunque es difícil que haya medidas totalmente efectivas para evitar esta situación”.
“Si no bajan las cifras, es previsible que en las próximas semanas no tengamos una buena situación”, ha explicado el consejero de Servicios Sociales, poniendo el acento en que al haber un contagio, este también extiende el virus dentro de la residencia. “Hay que conseguir un control muy alto en las propias residencias sobre las distintas actuaciones a realizar por cuidadores y empresas de servicios. En este sentido se está trabajando para alcanzar un resultado no tan negativo como en la primera oleada”.
El consejero ha querido “transmitir” esta situación y la “importancia” de que no haya situaciones de transmisión comunitaria. “Las residencias no son islas. Por mucho que se blinden, reciben personas externas como los cuidadores y, si estos están contagiados, los residentes pueden contagiarse”. En este sentido, la consejera de Salud, Sara Alba, ha reiterado que su departamento y Servicios Sociales han trabajado “de forma coordinada” para contener la pandemia”.
El Gobierno de La Rioja acometerá un segundo cribado extraordinario a los profesionales de las residencias de personas mayores y de personas con discapacidad con la realización de 2.500 pruebas diagnósticas.
