La Rioja

La ‘jubilación’ no cambia la rutina al esqueleto más popular de Logroño

Cuentan algunos pensionistas que el retiro les resulta de lo más contraproducente, al no saber adaptarse a su ‘nueva normalidad’ con rutinas que mejoren sus hábitos laborales. Otros, en cambio, habrían firmado su jubilación varios años antes si las cotizaciones a la Seguridad Social lo hubieran permitido, ya que saben gozar de la vida como primer mandamiento.

El esqueleto más popular de Logroño es de este segundo grupo. No es que no eche de menos estar plantado en su escaparate de las Cien Tiendas viendo la vida pasar, sino que en su nuevo destino le permiten mantener su rutina preferida: mimetizarse con la fiesta popular del momento.

Nada le gusta más que vestirse de vendimiador por San Mateo, de lo que fuera por carnavales o de Papá Noel al acercarse la Navidad. Y ahora que le ha llegado el retiro, su nuevo hogar le permite esos caprichitos, hasta el punto de que esta semana luce el atavío de mozo pamplonica en honor a San Fermín.

Lo ha hecho en su nuevo ‘destino’, después de convertirse en regalo de cumpleaños tras dos décadas de ‘servicio’ a la sociedad logroñesa. “Fue una gran sorpresa para mí, pues le tenía un cariño especial y siempre que pasaba junto al escaparate miraba a ver si lo habían cambiado”, señala a NueveCuatroUno Míchel López de Dicastillo, nuevo propietario de ‘Morgab’ (así lo ha bautizado en honor a la ortopedia que lo trajo a la ciudad) después de que su mujer Elena lo comprase para regalárselo por su cumpleaños.

“Aquí lo tenemos, intentando seguir con la tradición y vistiéndolo según los acontecimientos y lo suelo colgar en mis redes sociales. Esta vez está de Sanferminero y se ha quedado con las ganas de ir a Pamplona”, explica su nuevo ‘padre’. Tranquilo, Morgab, el año que viene será.

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