Crisis del Coronavirus

Pesadilla Erasmus de los riojanos: volver ‘con lo puesto’ y seguir pagando el alquiler

La crisis del COVID-19 ha puesto en jaque la vida de todos. Pensábamos que nuestra sociedad, país o ciudad era inmune. Nada grave podría pasar. Ha tenido que llegar un virus para llevarnos la contraria. Cuando la crisis se tornó en pandemia a muchos les pilló fuera de casa. Es el caso de cientos de estudiantes Erasmus que, en marzo, estaban cursando sus estudios en otras ciudades europeas. Clara, por ejemplo, una riojana alumna de la Universidad de Valladolid y estudiante de cuarto de Publicidad y Turismo, se encontraba en el norte de Italia, en Ferrara. Allí llegó en septiembre con una beca de nueve meses.

“Estuve en Italia hasta el 9 de marzo. Cuando las cosas comenzaron a complicarse mis compañeras de piso se volvieron a España y desde allí me iban contando que el escenario iba a peor, así que busqué el primer vuelo y al día siguiente estaba aquí”.

El problema de Clara, como de otros muchos estudiantes, es que se vino “con lo puesto”. Nadie pensaba que la situación se iba a convertir en este infierno. “Pensábamos que volveríamos a Italia pronto para seguir con las clases y hacer los exámenes o que, por lo menos, firmaríamos los papeles para poner fin al Erasmus”. Pero no ha sido así.

Son muchos los estudiantes que siguen pagando sus alquileres religiosamente cada mes -con gastos incluidos-. “No sabemos cuándo vamos a poder volver y, si dejamos de pagar, perderemos todas nuestras pertenencias”.

Más de doscientos alumnos de Erasmus que se encuentran en Italia cursando sus estudios han creado un grupo de WhatsApp para compartir esta situación. Todos saben que ahora la salud es fundamental, pero, al haberse suspendido los plazos de las ayudas económicas por parte de las autonomías, estos pagos están suponiendo problemas para muchas familias.

La única solución que se les ha planteado para recuperar sus bienes es pagar a una empresa de mudanzas, “algo que no vemos para nada factible ya que además de su elevadísimo coste, dependería de los propietarios de las residencias permitirles el acceso y que ellos mismos empaquetasen a su parecer nuestros objetos personales”.

La situación en este momento para regresar simplemente a por sus cosas se antoja complicada. “Ahora mismo para entrar al país necesitaríamos ser residentes -para ello es necesario estar viviendo allí al menos cinco años- o estar trabajando. No somos turistas tampoco, ya que estamos pagando un alquiler”.

El acuerdo de estudio acaba en junio, por lo que, a partir de ese mes, “no vamos a poder utilizar ese salvoconducto para llegar allí y recuperar lo nuestro”. El grupo de estudiantes se han puesto en contacto con varias instituciones: gobiernos regionales y universidades tanto españolas como italianas. “Nadie sabe nada, nadie puede hacer nada y nadie puede asegurar nada. Estamos en una situación de total desprotección”.

Subir