La UD Logroñés ha ganado al Salamanca por la mínima (1-0) y sigue consolidando su primera plaza en este Grupo II. Con lo justo y ante la mejor entrada de la temporada en liga, la hinchada lo tiene claro: “¡Lo, lo, lo, lo, lo, lo, vamos a Segunda con el Logroñés!”. 52 puntos, seis sobre el Bilbao Athletic (46) y diez sobre la Cultural Leonesa (42). Y además, Jaime Paredes ha recibido una gran ovación y se le ha visto sonreír en el campo. Situación inmejorable.
Una tónica se repite últimamente en Las Gaunas: todos los equipos se encierran y dan por bueno el empate. Los salmantinos han saltado al campo con la intención de cortar el ritmo riojano. A los ocho minutos, ya han visto dos cartulinas amarillas. Una táctica que ha ido al garete con la doble amarilla de Leo Sepúlveda. El jovencísimo lateral ha medido mal, ha cazado a destiempo a Paredes y sin querer, ha abierto el camino para los de Sergio Rodríguez. Sus lágrimas al abandonar el césped lo dejaban muy claro.
Fuente: Eduardo del Campo
Dicho y hecho. Ñoño ha aprovechado el hueco dejado por Leo para borrar a su defensor y ganar la línea de fondo. Ahí todo es más fácil, envío atrás para Rubén Martínez y remate del balear a la misma escuadra. ¡Así se desatasca un encuentro! Y minutos después, doble alegría. Luces en el electrónico: “Burgos 2 – Cultural Leonesa 0”. Y alegrón por parte de la hinchada, viendo que los suyos sacaban ya diez puntos a los leoneses. Unos minutos antes, Roni había entrado al verde en sustitución de Ander Vitoria, blanco de casi todas las faltas visitantes. El de Igorre se ha retirado tocado.
Con el viento a favor, los logroñeses han optado por la opción más conservadora, buscando descaradamente el contragolpe. Y contra todo pronóstico, el Salamanca se ha lanzado a por el empate. Aitor Larrazábal lo ha dejado claro desde el banquillo: Hugo Díaz, Amaro como revulsivos. Éste último dista mucho de ser profeta en su tierra. Así se lo ha recordado la parroquia, dedicándole una sonora pitada a su salida. Aculados atrás, la sombra del empate se acercaba. Gio y Martín han exigido dos paradas salvadoras a Miño y puesto todo aún más al rojo vivo.
Hugo Díaz ha estrellado su disparo en el larguero y Larrazabal ha gastado su último cartucho: Eduardo Ubis. Éste dista mucho de ser profeta en su tierra. Así se lo ha recordado la parroquia, dedicándole una sonora pitada a su salida. El riojano es un especialista en aguar la fiesta a su ex equipo, pero hoy no ha podido. Sin jugar excelso, este equipo sigue transmitiendo una gran seguridad atrás. Sin tantos apuros como podía preverse, el colegiado ha dado por finalizado el encuentro. Tres puntos más y a visitar el Tudelano este próximo domingo-
