Que el deporte femenino está de moda es un hecho incuestionable. La presencia de hitos conseguidos por mujeres en los medios de comunicación son cada vez más comunes y ya no resulta extraño (aunque quede mucho por hacer) ver a Carolina Marín, Ruth Beitia, Mireia Belmonte o Garbiñe Muguruza en la portadas de diarios de tirada nacional.
La estadística dice que las mujeres son mayoría, tanto en España (hay casi un millón más que hombres) como en La Rioja (unas cuatro mil más) y, sin embargo, la práctica deportiva sigue siendo mayoritariamente cosa de chicos.
En nuestra región, según los datos recopilados en la Memoria del Consejo Superior de Deportes, durante el año pasado se expidieron un total de 33.518 licencias deportivas. De todas ellas, solo una de cada cuatro (25%) tenían como propietaria a una deportista de sexo femenino, una proporción ligeramente superior a la del resto del país, donde el porcentaje de mujeres que practican deporte es del 22,3%.
Poniéndolo en contexto con los datos de población, no cabe duda de nos encontramos bastante lejos del objetivo de la igualdad. En cambio, la tendencia es más que positiva y La Rioja ha experimentado en los últimos tres años un incremento notable de licencias a mujeres hasta alcanzar las 8.317, casi mil quinientas más que en 2015.
Es, de hecho, un incremento del 21,2% en tan solo tres ejercicios, que se vio especialmente acentuado el pasado año, con un aumento del 13,7%, mientras que en el resto del país la tendencia positiva quedó reducida al 8,8%. Podemos hablar, por tanto, con toda razón, de un ‘boom’ del deporte femenino en La Rioja.
Ellas sí la saben meter
De las 66 categorías deportivas que establece el Consejo Superior de Deportes en su Memoria, en solo seis la participación de las mujeres es mayor que la masculina. Las más significativa, de largo, es la del baloncesto. No en vano, en La Rioja el número de jugadoras casi duplica al de los chicos: 2.499 licencias de chicas por las 1.811 masculinas.
Junto al deporte de la canasta, los otros mayoritariamente femeninos en la región son: voleibol (1.262 frente a 42), patinaje (357-29), hípica (244-83), gimnasia (83-2) y bádminton (193-110).
Uno de los mayores exponentes de éxitos deportivos riojanos conseguidos por mujeres ha sido el ascenso del EDF a la Liga Iberdrola, convirtiéndose en el primer conjunto de la región (masculino y femenino) en llevar a Las Gaunas el fútbol de élite nacional.
Casualidad o no, la irrupción del equipo logroñés en Primera División se corresponde con un importantísimo auge en el número de licencias expedidas a futbolistas mujeres. Todavía queda a años luz del fútbol masculino (7.310 chicos por 396 chicas, el 5,4%), pero su evolución ha sido exponencial a lo largo de esta década.
Sin ir más lejos, el número de licencias a jugadoras ha crecido un 48% en tan solo cinco años, al pasar de las 267 tramitadas en 2013 a las 396 del pasado ejercicio.
