La Rioja

Hipoxia-Hiperoxia: la última tecnología para mejorar el estado físico de los riojanos

Admitámoslo, somos seres de extremos. Pasamos del todo a la nada o, lo que es peor cuando de ejercicio físico se trata, intentamos pasar de cero a cien en menos que canta un gallo, con los riesgos que ello conlleva para nuestra salud. Por eso, no hay nada mejor que ponerse en manos expertas y dejarse asesorar por quienes pueden orientarnos para conseguir los mejores resultados en el menor tiempo posible, pero con criterio.

En la Unidad Deportiva de Clínica Alxen, Jorge Jiménez es el encargado de poner a punto a todo aquel que se enfunda la ropa de deporte para implementar su estado físico. “Ahora es cada vez más frecuente que la gente acuda a nosotros para recuperarse de una dolencia, no solo para ponerse en forma”, señala, explicando que su centro ofrece como factor diferencial “el trabajo individualizado para cada uno de nuestros clientes y la labor que realizamos en equipo el preparador físico, el médico, el fisioterapeuta y el nutricionista”.

En los últimos años la práctica deportiva está experimentando unos niveles de participación nunca antes recordados. Lejos de considerarlo como una ‘burbuja’, el preparador físico de la Unidad Deportiva de Alxen subraya que “es un cambio de tendencia definitivo, porque la salud no entiende de modas”. “La práctica de deporte es un comportamiento al alza, pero es vital que también lo sea en realizarla bajo la supervisión de los profesionales cualificados”, explica el preparador físico.

Allá donde no llega el talento innato aparece la tecnología y, en este sentido, Jorge Jiménez explica que la Unidad Deportiva de Alxen acaba de agregar a su equipamiento un mecanismo revolucionario que permitirá a sus usuarios entrenar en condiciones de ‘hipoxia-hiperoxia’. Se trata de Cellgym, un sistema de regeneración celular a través de las variaciones de oxígeno en el aire.

“Es una tecnología inédita en La Rioja y en prácticamente todo el norte de España”, señala, explicando que “está algo extendido el trabajar en condiciones de ‘hipoxia’, esto es, con déficit de oxígeno”. Con este entrenamiento se fomenta que el organismo experimente una serie de adaptaciones que elevan el rendimiento cuando el deportista vuelve al estado de oxígeno natural”. Lo revolucionario es la última adquisición de la Unidad: una máquina que combina las situaciones de ‘hiperoxia’ e ‘hipoxia’ mediante el uso de aire enriquecido en oxígeno.

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