Técnicamente, no será hasta que la Federación Española de Fútbol celebre su asamblea el próximo 20 de julio cuando la próxima edición de la Copa del Rey quede totalmente definida. Sin embargo, la Unión Deportiva Logroñés cumple con todos los requisitos normativos para disputarla, gracias al ascenso logrado por el Barcelona B a Segunda División el pasado fin de semana y a la permanencia obtenida por el Sevilla Atlético al cierre de la campaña.
Hace dos meses, desde este mismo medio explicamos que el conjunto riojano se enfrentaba a un jeroglífico por el que no sabría si tenía un billete para la Copa hasta que quedase definida la nómina de equipos que disputarán la Liga de Segunda División la próxima temporada.
Porque con el reglamento en la mano (la Circular 2 del 15 de julio de 2016, en su capítulo III), los conjuntos llamados a disputar el ‘Torneo del KO’ son todos los equipos de Primera y Segunda División; los cinco primeros clasificados en cada uno de los grupos de Segunda B y las dos mejoras puntuaciones de entre los equipos excluidos en esta última premisa; y los campeones de cada uno de los dieciocho grupos de la Tercera División (el Calahorra, en el caso de La Rioja). Todo ello, excluyendo del listado a los filiales.
Tal y como acabó la temporada, la UDL andaba pendiente del ascenso de un filial para asegurar su presencia en la Copa, ya que registró la tercera mejor puntuación (56 puntos) de entre los equipos de Segunda B que no acabaron entre los cinco primeros puestos de su grupo (excluyendo a los filiales), por detrás de dos conjuntos del Grupo IV: Melilla, con 60 puntos; y Marbella, con 58.
Sin embargo, la permanencia del Sevilla Atlético y la promoción del filial culé garantizan que la UD Logroñés esté en la Copa del Rey 17-18. Incluso podría acompañarle el Real Unión, a quien los riojanos superaron en la tabla en la última jornada del campeonato tras igualarle a puntos y contar con mejor bagaje goleador.
El currículum copero de la UDL
En su reciente historia son seis las participaciones de la Unión Deportiva Logroñés. A la primera de ellas accedió tras proclamarse el Varea (al que adquirió la plaza) campeón de la Tercera riojana en la temporada 2008-2009 y cayó en primera ronda ante el Villajoyosa.
Al año siguiente llegó hasta los dieciseisavos de final (su techo en el torneo), donde cayó ante el Valencia tras eliminar al Alavés, el Cerceda y el Badajoz. En la temporada 2011-2012 cayó ante el mítico Mirandés (aquel año se coló en semifinales con Carlos Pouso en el banquillo) en la tercera ronda, después de batir a Palencia y Noja.
La siguiente temporada deparó un derbi entre los dos equipos de Logroño (la SD Logroñés militaba en Segunda B) que se resolvió en la primera ronda con la eliminación de la UDL. Se abrió a partir de entonces un paréntesis de dos temporadas sin que los blanquirrojos disputasen la Copa que se cerró la campaña pasada con la eliminación en dieciseisavos a manos del Sevilla (tras superar en las rondas previas a Linares y UCAM Murcia).
La última participación del equipo riojano data de la campaña que acaba de finalizar, en la que el equipo entonces dirigido por Pouso cayó en la primera ronda en La Planilla ante el Calahorra.
