El calor se empieza a sentir en La Rioja. Conviene tener claros oasis climáticos en los que recuperar el aliento a cualquiera hora del día. Y en la zona este de Logroño, en la plaza Fermín Gurbindo, los vecinos saben que en el Naiande siempre encontrarán una buena sombra (con buena mesa y compañía) en la que guarecerse. En su terraza o en su interior, este amplio bar perfectamente climatizado siempre está abierto para recibir clientes, desde la hora del desayuno hasta la primera copa de la noche.
Este establecimiento, totalmente reformado, ha demostrado durante estos dos años que lleva abierto que es toda una referencia para disfrutar de sus tortillas de patata, tanto en la barra como para llevar -siempre previo encargo-, bocadillos, hamburguesas, platos combinados… Naiande es un buen punto de encuentro para toda la familia, con un café de calidad al mejor precio (1,10 el solo o el cortado) y los famosos Sandy, helados de vanilla con un montón de ‘toppins’ para consumir al gusto de los más pequeños, irresistibles también para los mayores más golosos. Raciones, ensaladas, sartenadas de patatas y huevos con un tercer ingrediente a elegir… el Naiande es por supuesto un espacio de referencia para los amantes de las pizzas.
En su horno de piedra descansa buena parte del secreto de sus fantásticas pizzas. De su interior salen cada día decenas de pizzas artesanas hechas para todo tipo de paladares, desde los más exigentes hasta los más flexibles pasando por aquellos más hambrientos y por los que acuden hasta este lugar para disfrutar de un picoteo compartido. Porque lo que prima aquí es el producto de calidad. Las pizzas son caseras y están hechas al horno de leña, trabajo que se nota en el producto final. Y este proyecto que hace barrio se demuestra también en los pequeños detalles, muy valorados por los clientes. Las pizzas tienen nombres muy reconocibles: Gurbindo, Maestro Lope, Ballesteros, Santa Juliana, Inmaculada, San José Obrero, Riojaforum, Riojana o Logroñesa. También incluye la pizza al gusto, porque todo se hace al momento, casero y muy rico.
Son pizzas que permiten disfrutar cualquier noche de la semana en buena compañía, tanto en el interior de local como por supuesto en la amplia terraza de la que dispone este espacio. “Aquí las familias están muy tranquilas porque los niños tienen una plaza enorme para jugar de forma segura mientras sus familias disfrutan de una cena agradable”, destaca Susana Oliván, gerente de este bar que ya lo tiene todo listo para seguir los partidos de la próxima Eurocopa en este local, por supuesto, los encuentros de España, “aunque mejor reservar mesa para asegurarse una mesa”.
Hamburguesas de pollo o de ternera por 8,50 euros (con huevo), que se pueden tunear al gusto, sin olvidar los bocadillos (vegetal, pollo alioli, pollo con pimientos verdes, lomo con queso y bacon, de tortilla, de jamón con queso, de calamares…) o esas propuestas más que necesarias para compartir con amigos o familiares. Además cuenta con un amplio abanico de ofertas dentro de su menú infantil, por no hablar de la carta de postres caseros que ponen el broche de oro al menú diario que se puede encontrar en este local.
“Queremos dar los mejor a quienes nos visitan”, destaca Susana, con detalles que sin duda marcan la diferencia: “Nuestras patatas fritas están cortadas a mano, y se fríen al momento, caseras y muy ricas”. Es especialmente durante los fines de semana cuando se dispara la afluencia de público, tanto en horario de día como de noche, pero si lo que el cliente busca es un servicio a domicilio para aquellos días en los que da más pereza salir de casa, Bar Naiande también lo ofrece a través de Just Eat para asegurar que su producto llega a todos los hogares de la capital.
