Y la vid despertó. No era de extrañar que lo hiciera con las temperaturas máximas que se han visto en los últimos días, superando por norma los 20 grados y dejando alguna que otra noche más propia de la época estival que de las últimas semanas del invierno. Así que las cepas de Rioja no han podido aguantar su ‘lloro’. Otras muchas ya tienen sus yemas hinchadas y alguna más adelantada que otra ya ha roto y se ha desprendido de la borra, esa fina capa de algodón, para empezar a abrir sus primeras hojas.
Yema hinchada en una viña de Rioja Oriental, este lunes.
Unos brotes que inauguran el baile de la vid y que han sido vistos principalmente en zonas puntuales de Rioja Oriental. En Alfaro, el pasado viernes ya se localizaron hojas verdes en algunas cepas, mientras que un 5 de abril de 2023 las cepas mostraban una estampa muy diferente: después de unas nevadas en febrero que retrasaron el ciclo comenzaba el lloro con unas temperaturas todavía invernales, por lo que los cortes de las cepas amanecían con pequeños carámbanos de hielo.
Así lo recuerda Rubén Pérez, de Bodegas Queirón. Junto a las viñas de Alfaro, en Calahorra asegura que también han roto ya algunas yemas, mientras que en Quel van más tardías: “En la zona mas próxima al pueblo están hinchadas, pero las viñas que tiran más hacia el monte todavía no muestran signos de brotación y creo que empezarán a brotar para después de Semana Santa”.
En Aldeanueva de Ebro ya ha despertado alguna garnacha más temprana. “Hemos visto también algunas cepas de verdejo. De cualquier forma, no es algo generalizado y conforme pasen los días se irán viendo más cepas asomando, pero está claro que el ciclo ya ha empezado”, apunta Abel Torres, quien este lunes ha captado esas cepas de garnacha ubicadas en la bodega Fincas de Azabache que empiezan a brotar.
Brotación en una viña de garnacha en la bodega Fincas de Azabache (Aldeanueva de Ebro), este lunes.
Mientras que en Alcanadre, por el momento, el lloro ha sido lo único que se ha visto estos últimos días en las cepas, algunas viñas de tempranillo de Ocón ya lucen sus primeros brotes también. Y con ellos, ahora la vista se posa en los días de Semana Santa y ese inicio primaveral que los avisos meteorológicos pronostican más húmedo y frío.
“Siempre que hay una brotación por estas fechas en las variedades más tempranas existe el riesgo de que heladas tardías se lleven por delante parte de la cosecha final”, apunta Natalia Olarte, directora de Viticultura de Vivanco, quien asegura que por esta zona de Rioja Alta la vid aún no ha llegado a esa fase de brotación. “Sí se han visto yemas hinchadas, pero confiamos en que se retrase el ciclo para evitar el riesgo de posibles heladas”.
