Antes de que todo se parara por culpa de la pandemia, la UD Logroñés visitó Lasesarre donde sumó uno de esos triunfos que le daban pistas del buen equipo que era. Aquella victoria dio más alas aún a una plantilla repleta de confianza. Entonces, el Barakaldo languidecía, prueba de que los clubes, a lo largo de su historia, pasan por situaciones de todo tipo. Hace cuatro años, este histórico del fútbol vizcaíno comenzaba su descenso a los infiernos tras haber acumulado una importante deuda con Hacienda, y este domingo visita Las Gaunas como el mejor equipo de la segunda vuelta a pesar de ser un recién ascendido. Lo hace con la intención de ganar, triunfo que le permitiría optar claramente al primer puesto en liga y por tanto al ascenso directo a Primera Federación.
Pero hace cuatro años, el equipo fabril bajó. Acabó en Tercera, donde ganó tiempo financiero para recuperarse. Mientras tanto, la UD Logroñés ha logrado su primer ascenso a la Liga de Fútbol Profesional, y también dos descensos en tres años que le han situado en su peor escenario desde su fundación en 2009. Y aunque en la ida empataron a uno, el partido de este domingo sí calibra dos proyectos que hasta hace cuatro años compartían destino, con duelos siempre marcados por la igualdad y el respeto.
Así volverá a ser este domingo. En la recta final del campeonato visita Las Gaunas el mejor equipo de esta segunda vuelta. Con 21 puntos, el Barakaldo lidera la clasificación virtual de enero a esta parte, la UD Logroñés, con 17 puntos, sería segundo, y el Bilbao Athletic, con 16, tercero. Así que los fabriles son de largo el mejor equipo del momento. Su carácter competitivo le está llevando a acumular casi dos temporadas sin derrota alguna. Ascendió la temporada pasada sin perder, con una suficiencia rotunda, y en este curso, un peldaño por encima, el Barakaldo solo ha cedido en Lezama, durante la primera vuelta.
Diego Martínez en el banquillo de Lasesarre en el partido de ida.
“Al final vuelven a ser lo que han sido durante muchos años, es parte de su genética”. Diego Martínez, técnico de la UD Logroñés, muestra máximo respeto por su rival. “Tras pasar por problemas económicos han vuelto al lugar que les corresponde y lo han hecho siendo muy competitivos, no se rinden nunca, y ahí están los resultados”.
Porque este Barakaldo no gana con la suficiencia que lo hacen habitualmente en casa el Bilbao Ahtletic o la UD Logroñés -salvo a la Real C recientemente- pero compiten siempre a gran altura y con resultados más ajustados han logrado dos victorias más que los riojanos. “Es un equipo al que jamás hay que dar por muerto”. Y recuerda Diego Martínez su triunfo en el descuento en el campo del Gernika. “Sus jugadores saben ganar duelos individuales, y si se ponen por delante -como pasó en la ida- cuesta hacerles un gol porque se cierran muy bien”.
Ahora visita Las Gaunas para acechar el liderato. “Vendrán con esa intención, sabiendo además que la semana que vienen reciben al Bilbao Athletic en casa”. El Barakaldo, cuatro años después, afronta una gran oportunidad, y tendrá que lidiar también con esa presión, porque llegamos a este punto nadie quiere fallar en los momentos importantes de todo campeonato. Tampoco el Barakaldo que vuelve por sus fueros tras casi un lustro marcado por los problemas económicos. Los están sabiendo resolver en una regeneración económica acompañada de buenos resultados deportivos.
