La SD Logroñés visita este jueves al Osasuna Promesas (Tajonar, 21:00), en lo que será el primer partido del año y también el debut en competición oficial para Aitor Larrazabal, el nuevo entrenador. Tras cuatro entrenamientos, el vizcaíno ya tiene ganas de competir: “Han sido días de mucho conocimiento y además rápido, para intentar que ellos absorban los conceptos que hemos podido transmitirles y nosotros, también para saber un poco más de ellos. Ha ido bien, en la medida que creemos que tiene que ir y ya estamos para competir, a un día de la competición, que es lo que todos teníamos ganas de que ocurriera”.
“Vamos a ganar, no hay otro pensamiento que ganar en Pamplona. El pensamiento es ir a ganar. Si tenemos la capacidad de conseguir la victoria, que a eso vamos, estaríamos empatados con ellos. Es un buen punto de partida, intentaremos demostrar que el equipo es capaz de hacer frente y de poder ganar”, ha recalcado.
“Los jugadores tienen ganas de revertir esa dinámica de la que viene el equipo, que les bloquea un poco”, ha reconocido. Pero al margen de eso, no ha olvidado que el fútbol es ante todo, un juego: “Al margen de esas directrices, también el hecho de que se suelten y vengan a disfrutar. Venimos a eso también, a disfrutar. A trabajar muy intensos, pero también a disfrutar; porque es un deporte que a todos nos gusta”. El nuevo técnico ha valorado el ánimo de sus futbolistas: “No les he visto tocados”. Sin embargo, sí ha reconocido que “la procesión va por dentro” y probablemente se sientan “minados” por los malos resultados.
El guardameta Iru entrena en Pradoviejo / Foto: SD Logroñés
Con casi 500 partidos jugados en su carrera, sabe de qué va esto y confía en los suyos: “Esto puede ocurrir en el deporte; puedes ganar, no ganar o incluso perder. Hay que cambiar la tendencia, no en vano, han ganado seis partidos. No todos los equipos los han ganado, así que son capaces y en esa capacitación, hay que otorgarles toda la confianza que podamos y que fluya esa comunicación”. De la misma manera, ha afirmado que “son futbolistas de Primera Federación y se les ve que son capaces”. “Es algo que enseguida se aprecia, se huele. Necesitan volver a tener esa confianza que necesitan y lo demás, que vaya ocurriendo en el propio césped”.
Respecto a los jugadores disponibles, Larrazabal ha explicado que no hay bajas confirmadas. Sin embargo, sí hay dudas: “Algún futbolista está con un poco de proceso gripal y hay que esperar hasta mañana (por el jueves)”. Otra incógnita es la presencia de Jannick Buyla, que depende del permiso de Guinea Ecuatorial para disputar el partido: “En principio, mañana vamos a estar todos, luego si mañana alguno se tiene que marchar con su selección, pues se decidirá o se verá”. Por otro lado está Dani Garrido: “Ya le han quitado los puntos y ahora necesita volver a sentirse jugador lo antes posible y que no refiera molestias”.
En cuanto al Osasuna Promesas, llega con 22 puntos, tres por encima de los blanquirrojos. Según el vizcaíno, ha explicado que los navarros “no son un filial al uso”, ya que juegan “más directo”. Mucho de sus jugadores son experimentados y ya no son sub-23. También ha aportado los ingredientes para lograr la victoria: “Necesitamos tener presencia en mediocampo y llegar al área rival, porque si no, no podemos hacer gol. Hemos trabajado bastante el aspecto ofensivo: cómo llegar, cómo presionar para intentar robar. Tenemos que ser un equipo intenso y ambicioso. Eso pasa porque los jugadores quieran y vamos a hacer todo lo posible para que ocurra”.
Respecto al fichaje de ‘Ferni’, se ha mostrado ilusionado: “Es un jugador ya tiene partidos en categorías superiores, en Primera Federación y necesita ese proceso de adaptación. Ya está entrenando bien con el resto de compañeros y tiene ganas de competir”. Y preguntado por posibles incorporaciones, como la de Luis Bilbao, ha expresado paciencia: “La dirección deportiva maneja sus plazos, estoy al corriente, pero los días van marcando lo que va a ocurrir. Lo que tenga que venir llegará y si alguien tiene que salir, lo aceptaremos”.
“Sabemos que desde el 22 de diciembre al 31 de enero son rumorología, movimientos y esto no me pilla de nuevas. Con la tranquilidad de intentar que el 31 de enero estemos los que queremos que estén y que ellos quieran estar y muy convencidos de que hay que defender este escudo con la cabeza alta y con todo el trabajo del mundo”, ha terminado.
