Logroño-Moncalvillo. Será la decimonovena etapa de la Vuelta a España 2024. Y en su edición 89, la cumbre riojana se presentará como una cita determinante teniendo en cuenta su perfil, su dureza y que formará parte de un encadenado montañoso de un par de días de duración puestos así para decidir la Vuelta en los dos últimos días antes de acabar la ronda española por las calles de Madrid.
1 etapa llana / 1 flat stage
⛰ 13 etapas de media y alta montaña / 13 hilly and mountain stages
〰️5 etapas onduladas (2 de ellas con final en alto) / 5 hilly stages (2 of them with high finish)
⏱ 2 CRI / 2 ITT
3.265 km pic.twitter.com/4rRLH32d8Q— La Vuelta (@lavuelta) December 19, 2023
Es la primera conclusión que se puede extraer una vez que este martes se ha desvelado al completo el recorrido de la próxima edición de la Vuelta a España, que tal y como adelantó este pasado lunes NueveCuatroUno, sitúa a la cima riojana en el foco de estas etapas que todo el pelotón se marca en rojo porque los ciclistas, directores de los equipos y sobre todo los organizadores saben de su dureza y por tanto del espectáculo que generan entre los aficionados a este deporte, tanto de los que vivirán la etapa desde las cunetas riojanas hasta los que observarán la llegada Moncalvillo a través del televisor.
Alejandro Valverde, durante la presentación del recorrido y tras un vídeo con las mejores imágenes del final de la etapa riojana en 2020, ha indicado al respecto de este final que “el Alto de Moncalvillo no se aprecia por la televisión la dureza que tiene”. Mientras que Perico Delgado ha explicado que “ha sido uno de los finales más emocionantes que he visto desde que comento la Vuelta”.
La etapa en La Rioja será la antepenúltima prueba de la ronda española, tras una jornada de media montaña por Rioja Alavesa, y que busca decidirse en los dos últimos días, con la subida a Moncalvillo y la la etapa reina de la próximo edición con la subida al Picón Blanco.
Moncalvillo ha conquistado al ciclismo español después de la espectacular etapa que se pudo ver en la edición del 2020, la de la pandemia, en la que no pudo haber público riojano en la cima -situación que cambiará el próximo verano y que hará lucir si cabe un poco más el fina de etapa- pero sí deparó momentos que ya forman parte de la historia de la Vuelta a España en sus últimas ediciones. Primoz Roglic (Jumbo Visma), segundo entonces en la clasificación, se impuso al líder Richard Carapaz en la línea de meta tras un apasionante duelo que recuerdan todos los aficionados a este duro deporte.
La salida neutralizada de la decimonovena etapa (viernes, 6 de septiembre) tendrá lugar en Logroño y el ganador levantará los brazos en la cima de Moncalvillo tras 168 kilómetros por territorio riojano. Etapa de un único puerto, el final, con once kilómetros de ascensión, que pasará eso sí por un tercera, el Puerto de Pradilla, pero que no debería tener mayor incidencia para que los grandes favoritos se la jueguen en el gran puerto riojano. Saldrán de Logroño, dirección Haro, para pasar por Belorado, Fresneda de la Sierra, el puerto de Pradilla, Ezcaray, Santo Domingo, Berceo para coger ya dirección hacia Moncalvillo.
Fernando Escartín, director técnico de la Vuelta, comenta al respecto que “será una jornada prácticamente llana hasta la parte final. El Alto de Moncalvillo, donde se impuso Roglič en 2020, cuenta con un inicio suave y concentra su dificultad en los kilómetros finales, que deberían aprovechar los favoritos en su penúltima oportunidad para abrir diferencias”.
De Vitoria a Maeztu pasando por La Rioja
Esta gran etapa de montaña será la segunda oportunidad, y central, para que los aficionados riojanos a la bicicleta se sumen a la fiesta del paso de la serpiente multicolor. Vivir una jornada con la bici, desde la que ver a los grandes referentes de este deporte tan espectacular cómo suben por rampas que habitualmente recorren muchos deportistas amateurs en cuanto tienen horas para coger la bici. Animar a los más grandes del pelotón desde la cuneta es uno de esos regalos que no siempre se puede abrir tan cerca de casa.
La etapa Logroño-Moncalvillo será el plato principal de un entrante que podrá degustarse desde un día antes. La Vuelta también pasará por territorio riojano, y por lugares bien conocidos por los cicloturistas. La etapa entre Vitoria y Maeztu (193 kilómetros) incluirá un largo paso por Rioja Alavesa. Los ciclistas entrarán a este territorio a través de la ascensión al alto riojano de Rivas de Tereso por Peñacerrada. Será una corta subida de 3,8 kilómetros al 5,6 por ciento de pendiente media, hasta una cima situada a 944 metros, ya en la muga entre las dos comunidades. A partir de ahí, la carrera tomará dirección hacia Labastida y se sumergirá en un mar de viñedos. Una imagen ya recurrente en la ronda española durante los últimos años, ya que La Vuelta también visitó la comarca en 2022 con victoria de Roglic en Laguardia.
A partir de Labastida, las carreteras se vuelven estrechas, bacheadas y con constantes subidas y bajadas. Un terreno que, además, puede estar muy expuesto a la acción del viento. Por lo tanto, quizá sea un buen tramo para que una escapada se labre su porvenir. Cerca del Ebro, la prueba llegará a Lapuebla de Labarca, desde donde se dirigirá a Laguardia y poco después, hacia el Alto de Herrera por Leza (1.102 metros). Será una ascensión corta, de menos de 5 kilómetros, pero ya al 8,5 por ciento de pendiente media. Lo peor está en su segundo kilómetro, que se mantiene durante una recta de 700 metros por encima del 12 por ciento y con rampas superiores al 14. Caña para las piernas. Qué duro es este deporte, Pedro.
La cara sur de Herrera es de primera categoría, un lugar ideal para que los aficionados riojanos acudan a animar a sus ciclistas favoritos. Más allá de la pura competición, este puerto de montaña esconde también un lugar llamado Balcón de La Rioja. Desde allí, la panorámica sobre la sierra de la Demanda es maravillosa, llegándose a otear lugares situados a varias decenas de kilómetros de distancia. Si la meteorología acompaña, el enclave dejará tomas aéreas espectaculares.
Después de transcurrir más de 50 kilómetros por suelo riojanoalavés, la etapa finalizará en Maeztu, incluido dentro del Parque Natural de Izki, ya en la Montaña Alavesa.
