La familia Paniego y, por extensión, la cocina riojana están este martes de luto. Ha muerto a los 96 de edad Félix Paniego, padre del chef Francis Paniego (cuatro estrellas Michelín), del sumiller Chefe Paniego (presidente de la Asociación Riojana de Sumilleres) y Marisa Paniego (vinculada al Echaurren junto a sus hermanos).
El padre de la saga gastronómica más prolífica de la historia de la cocina riojana descansa ya en paz, tras sufrir hace escasos meses un episodio cardiovascular. Del mismo informó a través de las redes sociales Francis Paniego, que destacaba entonces que “Félix es muy consciente de que hace tiempo que comenzó a jugar el periodo de descuento. Lo sabe y sigue queriendo salir a sentir y respirar el aire fresco de Ezcaray. “Ha recuperado su movilidad, sus recuerdos siguen ahí, su cabeza va un poco más despacio, pero hace mucho tiempo que dejo de tener prisa”.
En el verano de 2018 los Paniego perdieron a su gran referente en los fogones, Marisa Sánchez, a quien el pueblo de Ezcaray y la gastronomía española despidieron en loor de multitudes, recibiendo por última vez el cariño y el respeto de una región que Marisa ayudó a encumbrar desde el Echaurren, referente mundial de la cocina, entre otros platos, por sus croquetas, las patitas de cordero o las patatas con chorizo.
Con solo 18 años Marisa Sánchez tomó las riendas del negocio, honrado lo aprendido de su tía abuela Andrea, de su madre y de su abuela; mientras Félix se encargó de la gestión administrativa del negocio y de la selección de la bodega del restaurante.
Juntos, Félix y Marisa, hicieron de un modesto restaurante, el Echaurren, toda una Meca gastronómica cuyo legado ha potenciado la nueva generación de los Paniego, convirtiéndolo en el único restaurante riojano con dos estrellas Michelin.
