Restaurado en la década de los noventa por los alumnos de la Escuela Taller en Calahorra, en Centro Cultural Dean Palacios en Calahorra se verá próximamente inmerso en una nueva modernización de sus instalaciones con el objetivo de convertirse en un espacio más inclusivo gracias al uso de las tecnologías de la información y la comunicación.
En pleno corazón del Casco Antiguo de la ciudad, en la actualidad alberga las concejalías de Cultura, Educación, Turismo y Festejos y son diferentes las actividades culturales que se llevan a cabo en él.
El presupuesto previsto para el proyecto será de 228.658,19 euros y su licitación estará descompuesta en tres lotes diferentes destinados a la obra, al mobiliario y al equipamiento informático.
Se trata de una actuación incluida en la EDUSI ‘Calahorra, dos milenios de futuro’, por lo que es susceptible de ser cofinanciada al 50 por ciento por la Unión Europea a través del Fondo Europeo de Desarrollo Regional.
Con un uso intensificado en los últimos años por el incremento de la oferta formativa del área de Cultura, en los últimos tiempos han aflorado deficiencias tanto por el estado que presentan algunos elementos del edificio como por la necesidad de renovar su mobiliario y equipamientos TIC, claramente obsoletos.
Así, la intención del consistorio no es sólo transformar el Centro Cultural Deán Palacios, sino además mejorar la calidad de los servicios que ofrece gracias a la redistribución de espacios, especialmente en la primera planta del edificio, pero también a través de la modernización de los equipos informáticos.
Con todo ello, se pretende conseguir un edificio más polivalente y útil para la ciudadanía y las asociaciones que lo usan, y para acoger nuevas actividades y así maximizar su uso.
Uno de los servicios que pretende dar tras su reforma es un espacio de coworking en la planta primera con un mínimo de cuatro puestos de trabajo.
Asimismo, se realizarán actuaciones de saneamiento que paliarán los efectos nocivos para el edificio que la humedad provoca en la planta baja, donde se creará un almacén y se actualizará la actual sala de espera.
En el exterior, y precisamente para paliar los efectos de la humedad, se realizarán labores de mantenimiento en la fachada sin afectar a sus elementos protegidos mediante la renovación del actual zócalo de mortero de cal y su pintado, entre otras.
