El Foro Social de La Rioja ha reclamado este martes un sistema de seguridad desmilitarizado, sin armas de destrucción masiva, sin bases desplegadas en terceros países, una reducción del gasto en armamento y la creación de una cultura de paz.
La portavoz del Foro Social de La Rioja, Ángela San Martín, junto a un grupo de 15 personas, ha leído frente a la Delegación del Gobierno de España en La Rioja un comunicado en el que ha planteado el rechazo de esta asociación a la Cumbre de la OTAN que se va a celebrar en Madrid, del 29 al 30 de junio.
San Martín ha explicado que la reciente pandemia del COVID-19 ha desmontado la “falacia” de que se necesita un sistema de seguridad militarizado, ya que “la seguridad humana tiene que ver con la necesidad de vivienda, comida, trabajo digno, agua potable y sistemas de protección social que garanticen unos servicios públicos de calidad, entre otras cosas”.
El informe social mundial del año 2020 de las Naciones Unidas, ha detallado, advierte de la “creciente desigualdad” en todos los países, en concreto, “más de dos tercios de la población mundial vive en países donde la desigualdad ha crecido”.
También ha argumentado que el uno por ciento de la población más enriquecida tiene cada vez más recursos, mientras que el 40 por ciento de la más empobrecida obtiene menos de un 25 por ciento de los ingresos.
Asimismo, ha denunciado que la OTAN es un sistema de seguridad multinacional que actúa en el escenario internacional infringiendo el mandato “explícito” de la Carta de la Naciones Unidas, “lo que la convierte en una amenaza para la paz, como han demostrado sus acciones en Yugoslavia, Irak, Libia o Afganistán”.
La OTAN, ha detallado, es uno de los mayores impulsores de la carrera armamentística mundial, por lo que “es inaceptable que el gasto mundial en armamento en 2019 se estimase en 1,63 billones de euros, el 2,2 del PIB mundial”.
En este sentido, San Martín ha dicho que el Foro Social se opone a que el Gobierno de España aumente los gastos militares, como le impone la OTAN, “cuando debería ser al contrario, reducir estos gastos para aumentar los sociales”.
La sociedad mundial, ha asegurado, necesita avanzar hacia el fin del intervencionismo militar, hacia modelos de justicia social, climática, y hacia un sistema de seguridad desmilitarizado, “basado en la prevención diplomática de los conflictos, la multilateralidad y el cumplimiento de la Carta de las Naciones Unidas”.
Por todo esto, San Martín ha reclamado un sistema de seguridad sin armas de destrucción masiva, sin bases desplegadas en terceros países, una reducción del gasto en armamento y la creación de una cultura de paz.
“Estos principios deben guiar las acciones para cualquier acción política propia no basada en los intereses de otros países o grandes potencias”, ha remarcado.
La ciudadanía española ha demostrado ser pacifista, contraria a la guerra y a la carrera armamentística, “desde la desobediencia civil de los objetores de conciencia frente al servicio militar obligatorio hasta las grandes manifestaciones contra la guerra”, ha manifestado.
