La portavoz del Gobierno de La Rioja, Sara Alba, ha indicado este miércoles que Salud observa “de forma más concreta” la situación epidemiológica de Logroño, advirtiendo de que “si hay que adoptar restricciones más especiales, se hará”.
La capital riojana registra ha sumado este miércoles 99 nuevos positivos y 61 casos activos, lo que eleva la incidencia acumulada hasta los 381 casos por cada cien mil habitantes, casi el doble del umbral de riesgo marcado un día antes por el ministro de Sanidad, Salvador Illa. Además, la presión en la UCI del San Pedro sigue siendo elevada (hay 19 pacientes ingresados) y la tasa de positividad está por encima del 10% fijado por el Ministerio.
“Es indudable que le vamos a ver la cara a San Mateo catorce o dieciséis días después de las fiestas; puede ser uno de los motivos -que no el único- que explique la situación actual en la capital”, ha indicado la portavoz del Ejecutivo.
Tendencia “descendente” en La Rioja Baja
Sara Alba ha explicado que, pese al incremento de casos activos en ciudades como Arnedo y Calahorra durante los últimos días, “La Rioja Baja ha ha mejorado sus resultados y la tendencia es más importante que el dato diario. Lo que nos indica la tendencia es que en La Rioja Baja la tendencia es descendente”. “Es importantísimo que todas las medidas sean recordadas y aplicadas a diario”, ha recalcado.
“El mayor número de contagios se produce en el ámbito familiar, en el ocio y en los encuentros sociales. Ahí hay que reforzar la vigilancia de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, pero hay que apelar a la responsabilidad individual”, ha subrayado Sara Alba, quien ha recordado que “llevamos un mes con estas medidas y, si fuera necesario adoptar otras de mayor dureza, lo haremos con el resto de instituciones”.
