El Juzgado de lo Mercantil número 2 de Alicante ha condenado a la Universidad Internacional de La Rioja (UNIR) a cesar en el uso de la marca ‘UNIR’, al considerar que se confunde con la marca ‘Unirioja’, registrada por la Universidad de La Rioja (UR). Las otras marcas afectadas son ‘UNIR Universidad Internacional de La Rioja’, UNIR la Universidad en internet’ y ‘UNIR la universidad online’.
Al no ser una sentencia firme, sus servicios jurídicos han señalado a NueveCuatroUno que presentarán un recurso ante la Audiencia Provincial de Alicante y que, eventualmente, hasta en casación, por lo que el pronunciamiento judicial definitivo podría tardar años en llegar.
El juzgado alicantino, donde se encuentra la jurisdicción nacional de Marcas, ha señalado en su sentencia que se debe retirar y destruir cualquier signo distintivo o rótulo o manifestación en el que conste ‘UNIR’, tanto en sus locales como en sus bienes; así como cualquier documento relativo al tráfico mercantil, absteniéndose de utilizar cualquier denominación que suponga violación o genere confusión con las marcas preferentes de las que es titular la universidad.
La decisión, similar a la dictada por el Tribunal General de la Unión Europea (UE) en 2016, también condena al resarcimiento de los daños y perjuicios hasta el cese efectivo de la infracción y que se liquiden en ejecución de sentencia.
Asimismo, también exige inutilizar y en su caso destruir los moldes, planchas, matrices, negativos o cualquier otro material empleado en la comercialización de los servicios ilícitamente marcados que no puedan ser empleados para otra finalidad o para reproducir signos no infractores, así como los utilizados para la preparación de los documentos promocionales o publicitarios en que consten dichos signos que cumplan estas características.
Donde no entra esta nueva decisión judicial es en el uso del nombre ‘Universidad Internacional de La Rioja’ y omite cualquier referencia expresa a su uso, ya que la Oficina Española de Patentes y Marcas denegó dicha inscripción en mayo de 2009.
De hecho, el fundamento jurídico segundo de la propia sentencia hace una referencia a esa cuestión: “A su vez, por la demandante se acredita en su amplia documental (folios 1573 a 161) que su posición al respecto se puso ya de manifiesto antes incluso del registro de las marcas con denominación ‘Universidad Internacional de La Rioja’, pues la primera solicitud denegada con oposición de la actora es de 2008; además, en todas las ahora pretendidas de nulidad formuló respectivamente oposición, algunas con recurso de alzada. El conflicto desde luego es constante en la vía administrativa”.
