La llegada del buen tiempo anima a los logroñeses a coger con más frecuencia la bicicleta, tanto para el ocio como para desplazarse dentro de su rutina diaria, y esto crea problemas de convivencia entre peatones, ciclistas y conductores. El cambio en el ecosistema de movilidad de la capital riojana provoca pequeños trastornos, sobre todo con algunos comportamientos que incumplen las normas de circulación.
En los últimos días, numerosas quejas de ciudadanos han comenzado a aparecer sobre los ciclistas que circulan por las aceras con el peligro que ello conlleva y el “miedo” que causan en los viandantes. El portavoz del Ayuntamiento de Logroño, Miguel Sáinz, señalaba este lunes en los micrófonos de Radio Rioja (Cadena SER) que pronto arrancará una campaña de concienciación sobre seguridad vial.
En su habitual sección de los lunes para contestar personalmente a las críticas ciudadanas, Sainz también ha anunciado que la Policía Local comenzará después de Semana Santa una campaña de “preaviso” por la que todo aquel que circule por la acera con la bicicleta será advertido. En la segunda ocasión que sea ‘pillado’ por los agentes, la sanción oscilará de los 60 a los 200 euros.
Ante un posible endurecimiento de las medidas sancionadoras, el concejal ha indicado que el Ayuntamiento no tiene competencias para retirar la bicicleta a nadie que incumpla las normas (al ser la normativa de Tráfico de carácter nacional) como algún ciudadano ha propuesto y que sabe que será difícil que convenza a alguien sobre esta materia. “Una campaña de concienciación, si no va acompañada de medidas más radicales, no servirá para nada. Algo como poner matrículas a las bicicletas, que ya sé que no le parece bien al Ayuntamiento”, ha comentado un oyente.
Reiterando que las campañas de concienciación empezarán en próximos días, Sainz ha concluido que los peatones también deben respetar los carriles bici de la capital riojana, al tiempo que ha reconocido que hacen falta más policías de barrio para solucionar estos pequeños conflictos.
