En el vasto cosmos de la música clásica, algunas obras no solo resuenan en el momento, sino que trascienden el tiempo y el espacio, llevándonos en un viaje etéreo hacia la belleza y la emoción. Este domingo, a las 19:30 horas, el Coro Sinfónico de La Rioja nos invita a embarcarnos en una odisea encantadora a través del genio musical de Antonin Dvorak, explorando dos de sus obras más notables: la Suite Checa, op. 39, y la Misa en Re mayor, op. 86.
En el corazón de esta experiencia musical extraordinaria se encuentra la Joven Orquesta de Pamplona, una fuente de talento joven y vibrante que irradia pasión y maestría musical sobre el escenario. Nacida en 2017 con la misión de nutrir y cultivar el potencial de jóvenes músicos, esta orquesta ha florecido bajo la dirección magistral de Mirari Etxeberria, convirtiéndose en un símbolo de excelencia y dedicación en el universo de la música clásica.
Así, en esta noche de música y celebración, no solo se honrará el legado de Antonin Dvorak, sino también el espíritu innovador y apasionado de todos estos intérpretes, quienes con su presencia en el escenario nos recuerdan que mientras continuemos nutriendo y apoyando el talento emergente, el futuro de la música clásica brillará con un resplandor aún mayor. Bajo la batuta magistral de José Luis Barrio Bastida, el Coro Sinfónico de La Rioja y la Joven Orquesta de Pamplona darán vida a cada matiz y color de estas obras maestras, cautivando nuestros sentidos y despertando nuestra imaginación en un viaje sonoro hacia lo sublime.
