La Rioja

El Gobierno renueva el convenio con Cocina Económica para personas en exclusión

El Gobierno de La Rioja, a través de la Consejería de Salud y Políticas Sociales, ha renovado el convenio anual con Cocina Económica de Logroño para colaborar económicamente, con una aportación de 44.000 euros, en el desarrollo del ‘Programa de Acogida y Atención Integral a las personas o familias en situación o riesgo de exclusión social y sin hogar’.

Según ha informado el Ejecutivo riojano en un comunicado, la consejera de Salud y Políticas Sociales, María Martín ha participado este viernes en una acción para conocer los detalles de este programa de la mano del presidente de Cocina Económica, Luis Álvarez.

El ‘Programa de Acogida y Atención Integral de las personas o familias en situación o riesgo de exclusión’ da respuesta a la necesidad de disponer de un espacio digno donde vivir y en el que desarrollar los aspectos más elementales de la convivencia social. Asimismo, presta formas alternativas a la convivencia individual o familiar, paliando los procesos generadores de desajustes graves y de exclusión social, explica el Gobierno riojano.

A través de este convenio entre la Consejería de Salud y Políticas Sociales y Cocina Económica de Logroño, se pretende solucionar los problemas de alojamiento temporal que pueden presentar personas o familias debido a circunstancias de conflicto en su entorno de convivencia, situaciones de marginación, y otras problemáticas específicas propias del ámbito de competencia de los Servicios Sociales.

Se trata de intervenciones ante situaciones complejas que requieren un diagnóstico y un proyecto concreto de atención integral para la reestructuración personal y social, por lo que el Programa apoya y complementa los procesos de inserción.

Así, implica el tratamiento individual o del grupo familiar y el abordaje de conflictos, así como la realización de un proceso básico de socialización; para ello, el programa contempla actuaciones de carácter socioeducativo, psicológico y de habilidades personales, así como de atención de carácter asistencial a las necesidades básicas que presentan las personas o familias en estas situaciones.

Este programa establece tres grados en su realización atendiendo al nivel de autonomía y capacitación que adquieran los usuarios: convivencia residencial, convivencia semiautónoma y autonomía casi plena.

A ellos se acogerán las personas o familias usuarias en función de su progresión o regresión personal hasta finalizar el programa y alcanzar los objetivos planteados en cada proyecto individual, concluye el comunicado.

Subir