Rodearse de buenos amigos. Es la única manera posible para celebrar las cosas importantes de la vida. Y abrir de forma ininterrumpida durante treinta años bien merece una celebración significativa. Y Ángel Pérez, que prefiere ver la vida de forma positiva, está dispuesto a celebrar durante toda esta temporada los treinta años de La Vieja Bodega. Para ello ha preparado lo que ha denominado, con cierta picardía, la Agenda 30/30.
Treinta años y treinta actividades, “aunque al final creo que me ha va a salir alguna más”, explica con gesto divertido el gerente de este espacio gastronómico clave dentro de la cultura culinaria de La Rioja. Ubicado en Casalarreina, esta casa del siglo XVII es un punto de encuentro para quienes visitan La Rioja Alta. “Hay que celebrar que aquí seguimos. Todos estamos de paso, y las cosas buenas de la vida hay que celebrarlas”.
FOTO: Fernando Díaz/Riojapress
Desde finales de este mes de abril y hasta comienzos de octubre, La Vieja Bodega celebrará tres décadas de buena mesa con treinta actividades que trasciende lo puramente gastronómico. “Nos encanta la cocina, nos dedicamos a dar de comer a las personas. Lo celebramos, pero también queremos dejar constancia que además de cocineros, o de abogados, o de médicos… somos también otras muchas cosas: amantes de la pintura, de la escultura, de la música… “y es lo que queremos contarle a nuestros amigos durante todos estos meses”.
La nueva temporada de La Vieja Bodega se presenta muy especial. En primer lugar, en lo gastronómico. “Vamos a recuperar platos emblemáticos de esta casa”, apunta Ángel Pérez. Como la mítica ensalada de lecherillas o el exitoso solomillo con salsa de fresas”. En total serán veinte platos legendarios que se recuperan para festejar estos treinta años de trayectoria.
“Miramos al pasado, lo hacemos en el presente, porque seguimos pensando en el futuro”. Ángel Pérez no para. Este viajero incansable presenta un treinta aniversario a la altura de su casa de comidas: “Sabemos la responsabilidad que tenemos, porque somos conscientes de que La Vieja Bodega, y no quiero sonar presuntuoso, es una institución”.
FOTO: Fernando Díaz/Riojapress
En el programa de actividades, que “se irán presentando en la página web en tiempo y forma”, habrá tres exposiciones de pintura, otra de escultura y una quinta de fotografía. Esta temporada se van a presentar tres libros en La Vieja Bodega: uno de vinos y viajes, otro de antropología, y un tercero sobre la historia de la casa en la que ahora mismo se ubica este restaurante. Se van a desarrollar también dos presentaciones de nuevos vinos, hechos para la ocasión: uno, de Abel Mendoza, y otro, de Valenciso. Se celebrarán siete catas, cuatro o cinco conciertos y la gran fiesta de La Vieja Bodega el próximo 16 de mayo. Entonces, los amigos de este restaurante se juntarán para celebrar la vida: de comer bien en la mejor compañía.
