La SD Logroñés visita al Barcelona Atlètic (domingo 12:00), con la intención de desbloquearse con una victoria de catarsis. Estuvo cerca esa reacción ante el Sabadell (1-1), donde el equipo cortó su racha de cuatro derrotas consecutivas. Un insuficiente punto que bien pudo convertirse en tres. Después de ocho jornadas sin marcar, Escobar anotó su sexto gol en liga y rompió una sequía de más de 400 minutos para su equipo. Lo más difícil estaba hecho, la alegría había llegado a Las Gaunas, pero todo volvió a su punto de partida. Cuatro minutos después del 1-0, Moyano empató, libre de marca. Otra vez, un reseteo hacia el saque inicial.
Así se puede entender el sentir de un equipo que lleva cinco partidos ligueros sin ganar: “No queremos que nuestra necesidad se convierta en prisa. Prisa por ganar, por salir de los puestos de descenso y encontrarse con el buen fútbol. Un triunfo de transformación, que haga que los jugadores activen su potencial y puedan dar lo máximo. Con 20 puntos, la línea de permanencia está en 21. No está tan lejos, pero cada vez quedan menos jornadas. 17, en concreto: “Hay que gestionar las cabezas de los futbolistas para conseguir un resultado positivo”. La psicología lastra a este equipo, que se deshace por instantes en las áreas. Mal asunto, porque son las zonas clave del fútbol.
Moyano empató el encuentro ante el Sabadell, ante las quejas de Castellano / Foto: CE Sabadell
Ante ese panorama, Larrazabal quería alternativas en un mercado con muchas llegadas. Hasta seis en el mercado invernal. Primero llegó Ferni, justo antes de Navidad. Posteriormente, con la llegada de Larrazabal al banquillo, el mediocentro Alessio Miceli se convirtió en futbolista blanquirrojo. La lesión de Dani Garrido, más larga de lo esperado, ha podido influir en esta circunstancia. Sin embargo, los movimientos se han concentrado en la recta final. Conejero llegó durante la pasada semana y ya debutó. Mientras tanto, el mediocentro Curro Muñoz, el mediapunta Antonio Salado y el punta austríaco Schmerböck firmaron en los últimos días de la ventana invernal.
En total, son seis llegadas y cuatro salidas en invierno: la de Toni García, por decisión del futbolista, tal y como confirmó Larrazabal; las de Arratia y Carmona, que no tuvieron demasiados minutos y por último, la del mediocentro Jannick Buyla. El centrocampista de Guinea Ecuatorial llegó en noviembre para sustituir a Edu Martínez. Sin pasar tres meses, se ha desvinculado de la entidad. Lo ha hecho días después de que la Policía Nacional apuntara su nombre como sospechoso de participar en el presunto amaño entre el Badajoz y el Pontevedra, durante la última jornada de la temporada pasada.
Con tantos nombres nuevos, Larrazabal ha quedado satisfecho y ha manifestado que está “a muerte con ellos”. Sin Dani Garrido y Rubio por lesión, el equipo viaja a Barcelona con la intención de sacar tres puntos y dar un golpe sobre la mesa. Podría ser el debut de Schmerböck, que espera celebrar goles. Es austríaco, así que deberá entenderse con sus compañeros, previsiblemente en alemán o inglés. Según su propio entrenador, la Sociedad cuenta con varios integrantes que hablan su lengua y además, ha recalcado que “el idioma del fútbol es universal”. Tor es gol en alemán y esa es la palabra que un delantero centro tiene entre ceja y ceja.
Foto: SV Ried
El Johan Cruyff supone la primera oportunidad para comprobar si Juanma Barroso ha podido dar un giro adecuado a su planificación deportivas. Las cosas no han salido bien hasta el momento y contando con la interinidad de Edgar Jiménez en Lugo, ya han pasado hasta cuatro entrenadores por el banquillo blanquirrojo. Ni Jordi Fabregat ni Andrés García consiguieron la continuidad necesaria. Larrazabal, por el momento, busca su primer triunfo como técnico. Hasta ahora, ha cosechado tres derrotas y ese último empate. A la quinta, espera que sea la vencida. Aunque sea contra un gigante.
La jornada, además, puede ser propicia en caso de lograr la victoria. El Teruel se mide al Tarazona y el Sabadell recibe al Rayo Majadahonda. El Cornellà, mientras tanto, recibe al Celta Fortuna. Puede ser una jornada propicia.
Un rival con múltiples argumentos
El Barcelona Athletic llega como sexto clasificado, con 34 puntos y a uno solo del playoff. Lleva dos victorias consecutivas, la última, frente al Fuenlabrada (1-2). Buena reacción de los hombres de Rafa Márquez, caracterizados por su calidad. Más que subir a Segunda, su objetivo es llenar de talentos al primer equipo. Así lo ha hecho con el central Pau Cubersí o con otros jugadores en el pasado, como el caso de Ilias. Su dimensión supera a la de casi todos los equipos de Primera Federación y solo el filial del Real Madrid puede hacerle sombra. Según el portal Transfermarkt, el valor de su plantilla roza los 19 millones de euros. Incomparable con la SD Logroñés.
Pau Víctor, delantero cedido por el Girona, ya lleva 11 goles y es el pichichi del Grupo I. Ojo también al mediocentro alemán Noah Darvich, una ‘joya’ de solo 17 años o a Marc Bernal, que con 16, ya es importante en el equipo. Jugadores de Alemania, Georgia, Estados Unidos o Senegal se juntan por un futuro en ‘Can Barça’. Entre ellos, el central Fayé, al que Larrazabal ha dedicado un gran elogio: “Yo no he visto en tiempo algo así, para mí es un fantástico futbolista”.
Con todo esto, la SD Logroñés intentará ganar en un campo en el que no ha ganado. Su única visita tuvo lugar el 15 de abril de 2023 y los catalanes vencieron por 3-0. En Las Gaunas, en cambio, el balance es opuesto. Dos partidos, dos victorias riojanas. La primera, espectacular por 4-0 (23 de diciembre de 2022) y después, en la primera jornada de esta competición, a finales de agosto (1-0).
Por último, arbitrará Víctor Pérez Peraza, de 39 años. Este veterano colegiado canario ya arbitró once temporadas en la antigua Segunda División B y esta es su tercera campaña en Primera Federación. 170 partidos de experiencia en los que nunca ha arbitrado la SD Logroñés.
