Aunque la situación no es nueva, el problema se ha agravado tras el concurso de traslados del pasado 16 de septiembre. La Guardia Civil en La Rioja está a falta de personal, especialmente en lo que se refiere a patrullas de Seguridad Ciudadana y esencialmente en la tercera compañía, la que presta servicios en Calahorra y La Rioja Baja en general. La Asociación Unificada de Guardia Civiles de La Rioja calcula que la plantilla de los agentes de puesto está reducida casi a la mitad con casos sangrantes en acuartelamientos de las zonas más rurales.
El problema central, para la asociación, no es únicamente la falta de personal, sino la mala distribución de los mismos. “Somos pocos y además estamos mal distribuidos, lo que complica más las cosas”. Desde Delegación de Gobierno se asegura que en estos momentos son 1.229 los efectivos que se encuentran en La Rioja. La asociación matiza que, de todos ellos, muchos se han ido a cubrir nuevos servicios que se prestan reduciendo ese personal de las calles riojanas. “Se han creado nuevos servicios y se ha cogido a gente de Seguridad Ciudadana, lo que hace que nos encontremos con cuarteles sin personal”. En Calahorra hace apenas unos días había que esperar dos semanas para poder interponer una denuncia por el robo en un vehículo.
Así, en la actualidad, en La Rioja sólo los cuarteles de Haro, Villamediana y Calahorra están abiertos las 24 horas del día. “El resto están sólo en horario de mañana y hay días que ni eso”. El problema se agudiza especialmente en La Rioja Baja por el efecto frontera con Navarra. “Existen en la ribera de Navarra muchos cuarteles en los que hay agentes riojanos trabajando porque las condiciones de sueldo, pero también de vacaciones y de días de asuntos propios, son mucho mejores”. Así, decenas de agente han pedido durante años traslados a la comunidad vecina, ya que a pesar de tener que hacer un puñado de kilómetros para acudir a su puesto de trabajo cobran una media de 600 euros más.
El problema siempre ha estado ahí. “La Rioja en la Guardia Civil es una zona de paso antes de acceder a un destino más cercano al lugar de nacimiento”, pero en este último concurso de traslados la situación se ha complicado. “Más de un centenar de agentes se han marchado a otras comunidades; no es un problema nuevo, en fiestas de Arnedo tuvo que bajar gente de Haro para poder cubrirlas”.
Llegada de agentes navarros
En la actualidad, y para cubrir esa merma de agentes desde el mes de septiembre, Guardia Civil de Navarra hace servicios puntuales en La Rioja con el objetivo de paliar esta falta de efectivos. “Vienen de Estella, hacen un par de horas y hay presencia en la calle, pero es casi testimonial. Ni conocen la zona, ni los pueblos. El mundo rural es el que está perdiendo en presencia policial especialmente”.
Además, la llegada de los agentes navarros no soluciona en su totalidad el problema, según los representantes de la asociación. “Llegan y detienen a alguien, pero luego el papeleo, el traslado al juzgado y todo lo demás lo tienen que seguir haciendo los agentes de los puestos riojanos”. Más trabajo para unos agentes que se encuentran bajo mínimos de personal. “No es casualidad que la delicuencia haya subido un 4,7 por ciento en Calahorra, mucho más que en Logroño, y eso que hay que agradecer el trabajo de Policía Local que colabora para que no se note tanto la falta de presencia de Guardia Civil”.
Hay casos concretos en acuartelamientos de La Rioja Baja que son sangrantes. Pero no sólo en Seguridad Ciudadana, hay problemas de personal también en servicios como el de Atestados, que se encargan de cubrir los accidentes de tráfico. “La plantilla está haciendo servicio de 24 horas de manera unipersonal”. El ejemplo más claro lo encuentran en la sanidad. “Tenemos cuarteles sin agentes que es como tener centros de salud sin médicos”.
Nuevos servicios
Otro de los problemas a los que se añade la falta de agentes es la creación de nuevos servicios. “Han creado la USECI, que es un servicio muy necesario, pero lo que han hecho es formar a gente que estaba en Seguridad Ciudadana, lo que supone desvestir un santo para vestir otro”.
Una de las causas de esta falta de personal la achacan a que “La Rioja supone un lugar de paso para los agentes antes de encontrar un puesto más cercano a sus lugares de origen por lo que vienen agentes muy jóvenes que muchas veces se van a Madrid 2 o 3 meses a hacer cursos. Están aquí en plantilla, sí; pero no están en la calle”. Otros están comisionados en otras tareas que no es la de patrullar las calles.
Delegación contabiliza en estos momentos un total de 1.229 efectivos (a fecha de septiembre de 2023 que es la última con la que cuenta). “En esas cifras cuentan a los agentes del GAR que están trabajando por toda España o a los que hacen otras formaciones en La Rioja como los GRS, pero esa gente no está en la calle”. Además muchos se encuentran en labores administrativas. “Se nos come la burocracia y ese trabajo se podría hacer perfectamente con gente civil”. Las oficinas de la comandancia están al 120 por ciento de su capacidad, aseguran desde la asociación.
Una de las propuestas que plantean para solucionar el problema es que “en los cuarteles pequeños haya personal en reserva que tengan un trato cercano con el ciudadano y con los alcaldes, que les soluciones los problemas” y eso podría permitir tener más gente en la calle. “Tú cuando tienes un percance quieres que llegue alguien y te lo solucione y luego ya irás a poner la denuncia a donde haga falta”.
“Seguridad garantizada”
Desde Delegación de Gobierno, sin entrar en datos concretos, reconocen que la situación “es la que es” después del concurso de efectivos del pasado mes de septiembre, pero también que “en 2018, antes de llegar el Gobierno de Sánchez a la Moncloa, los efectivos en La Rioja eran menos (1.186)”, explica Beatriz Arraiz, Delegada de Gobierno. “Hasta entonces había una pérdida constante de efectivos y desde entonces, a pesar de momentos puntuales como el que hay ahora, se están incrementando los efectivos”. Así, asegura que han sido cinco las ofertas de empleo que han salido desde 2018.
El problema puntual se ha intentado paliar con efectivos de Navarra que están cubriendo las zonas que más efectivos han perdido, como la tercera compañía en la zona de Rioja Baja. “La seguridad en La Rioja está garantizada a pesar de la situación que sólo es producto de un baile de puestos”.
“No podemos negar que se han perdido efectivos, pero se trata de una situación puntual”, define desde Delegación de Gobierno. También achaca el problema al efecto frontera, “pero también se nota en otros servicios públicos como la Sanidad o la Educación”. Además, agradece el esfuerzo adicional que están haciendo los agentes riojanos y asegura que “se está trabajando con el Gobierno para que, en próximas fechas, salga un concurso extraordinario para todas esas vacantes en las zonas en las que se han perdido agentes, que no es sólo en La Rioja”.
