El nuevo Punto de Encuentro Familiar de Haro evita los traslados a Logroño y Mirande Ebro (Burgos) para acceder a este servicio social especializado y gratuito en La Rioja, que ya se ofrece en la capital riojana y en Calahorra.
La consejera de Salud y Políticas Sociales de La Rioja, María Martín, ha visitado este viernes el nuevo Punto de Encuentro Familiar jarrero, en el que se han invertido 320.000 euros, ha detallado el Gobierno regional.
Se trata de un recurso gratuito especializado en la intervención de situaciones de conflictividad familiar en las que la relación de los menores con algún progenitor o miembro de su familia se encuentra interrumpido o es de difícil desarrollo.
El acceso a este servicio siempre es mediante resolución judicial, ha recordado Martín, quien ha dicho que, desde 2018, las sentencias del Juzgado de Haro eran derivadas a Miranda de Ebro.
“La práctica, la propia demanda social y el deseo de este Gobierno de dotar a las tres comarcas y sus demarcaciones judiciales de los mismos recursos ha dejado claramente al descubierto la necesidad de implantar este servicio en Haro”, ha indicado, con el fin de “evitar que los usuarios de la zona se trasladen a Logroño o a Miranda de Ebro”.
La red de Puntos de Encuentro Familiar de La Rioja se configura como lugares amables con un entorno neutral y seguro, atendido por profesionales y en el que se garantiza el bienestar de los menores que son derivados por sentencia Judicial para establecer la relación con sus progenitores o familiares acordados por los Juzgados.
Su objetivo, además de hacer cumplir el régimen de visitas establecido, es ofrecer a las partes los recursos y apoyos especializados para la generación de las habilidades y vínculos afectivos que permitan una relación futura armónica y autónoma.
Ello permite contribuir al buen desarrollo afectivo y emocional de los niños y adolescentes; así como a garantizar su seguridad y bienestar y la del padre o madre vulnerable.
Estos centros son gestionados a través de contrato de gestión por la Asociación para la Protección del Menor en los casos de separación de sus progenitores (APROME).
El Punto de Encuentro Familiar de Logroño comenzó a funcionar en 2002 y el de Calahorra, en 2010 y, hasta el pasado 31 de marzo, han atendido a 5.304 personas usuarias directas, de las que 2.522 son menores, todos ellas derivados de 1.369 expedientes.
El de Haro, que inició su andadura el pasado 8 de noviembre, ya ha recibido 6 expedientes, que corresponden a 19 personas usuarias, de las que 7 son menores.
