La UD Logroñés y el Calahorra cruzan sus caminos en Las Gaunas (domingo 18:00), en un derbi riojano que enfrenta a dos recién descendidos de Primera Federación. Ascender es un objetivo ineludible para los blanquirrojos, que ocupan actualmente posición de playoff con 18 puntos, quintos. Con trece se sitúan los rojillos, tres por encima del descenso. Más allá de la clasificación, el partido será un cruce de caminos para futbolistas que han defendido ambas camisetas (Miguel Martínez, Cristian, Iñaki, Arias…) y los dos técnicos que han hecho lo propio (Diego Martínez y Juan Carlos Pouso). Historias entrelazadas sin cesar.
Un mar de conexiones entre ambos equipos
Difícil imaginar partidos con más conexiones que este derbi. Hasta diez jugadores de las plantillas de UD Logroñés y Calahorra han jugado en el otro equipo. Ocho militan en la actual UD Logroñés: son los centrales Cristian y Ugarte, el lateral izquierdo calagurritano Iñaki, el lateral derecho Yasin, el centrocampista Sarriegi y los atacantes Arias, Yurrebaso y Madrazo. Casi nada. Por parte del Calahorra, son dos piezas: el guardameta Miguel Martínez y el lateral derecho Simón Lecea.
Ese mismo camino se recorre en los banquillos. En el local, Diego Martínez ya entrenó al Calahorra. Llegó a La Planilla solo semanas antes del estallido del COVID-19 y todo quedó en suspenso. Su siguiente temporada, la 2020/21, fue histórica para los riojabajeños, que lograron ascender a Primera Federación y disputaron el playoff de ascenso a Segunda División. Solo el Burgos, en semifinales, pudo apearles del camino.
Foto: CD Calahorra
En el caso de Pouso, fue toda una institución en la UD Logroñés. Entrenó 101 partidos a los blanquirrojos entre 2014 y 2016, temporadas donde los riojanos jugaron dos playoff de ascenso a Segunda División. A mitad de la temporada 2016/17, dimitió como técnico por los malos resultados, pero continuó como director deportivo hasta 2018. Indiscutiblemente, el leioztarra es uno de los mejores técnicos de la historia de la entidad.
Con una maraña tal de conexiones, es difícil que ninguno de los dos equipos se sorprenda del otro. Todos los partidos se graban, se pueden ver y ambos equipos se conocen a la perfección. Además, su último encuentro ocurrió durante el pasado 13 de septiembre. Fue en la final de la fase autonómica, que concluyó con 0-3 favorable a la UD Logroñés.
Los blanquirrojos engrasan su máquina
Los hombres entrenados por Diego Martínez llegan a esta cita tras empatar frente al Barakaldo en Lasesarre (1-1). Enzo, en el minuto 88, marcó su tercer gol en liga para salvar un punto. En otras circunstancias, el resultado sería positivo; más teniendo en cuenta que los vascos no pierden un partido liguero desde marzo de 2022. Sin embargo, el contexto es diferente. El Bilbao Athletic lidera el grupo con mano de hierro (28), diez por encima de los riojanos, a falta del derbi. El ascenso directo a Primera Federación se ha complicado y los logroñeses ya no tienen margen para fallar mucho más. Ante tal exigencia, no les queda otra que enfilar el camino de la victoria.
La alta carga de partidos, diez ligueros, siete de Copa Federación y otro de Copa del Rey; pasa factura. Durante semanas, los blanquirrojos se vieron obligados a jugar miércoles-domingo, como si de un equipo ‘Champions’ se tratara. Cierto es que el camino mereció la pena, pues llevó al partido copero ante el Valencia. Más allá del competido 0-2 frente a los chés, lo importante fueron los 8.010 aficionados en Las Gaunas y gracias a ellos, la taquilla que logró la entidad. Toda cara tiene su cruz: quizá el desgaste ha tenido algo que ver en los seis empates cedidos en la competición liguera.
De vuelta al ritmo domingo a domingo, la UD Logroñés confía en que el largo plazo marque diferencias en el campeonato. Su presupuesto, plantilla y recursos apenas encuentran rivales en este Grupo II. Poco a poco, la máquina se ha engrasado. De hecho, el equipo lleva trece goles y diez puntos en los últimos cuatro partidos. Goleadas frente a la Mutilvera (3-0), el San Juan (0-4) o el Arenas de Getxo (5-1) han disparado su producción ofensiva y lanzado un mensaje claro a sus oponentes: el ascenso sigue entre ceja y ceja. Además, por primera vez en muchas semanas, no tienen bajas. “Convocaremos a todos y descartaremos a cuatro el domingo”, ha afirmado su técnico.
FOTO: UD Logroñés/ Riojapress.
Por su parte, los muchachos entrenados por Juan Carlos Pouso vencieron por 2-1 al Brea y cortaron su mala racha. Los rojillos comenzaron la temporada con dos victorias consecutivas que les auparon al liderato. Sin embargo, hasta la anterior jornada, el equipo solo fue capaz de conseguir cuatro puntos de 21 posibles. Una dinámica que llevó al equipo hasta el puesto de promoción de descenso, un lugar inesperado para un recién descendido. Pouso, a principio de la campaña, ya advirtió que la campaña debía ser para “especialistas”. Esto es el pozo del balompié nacional, un abismo del que es bien difícil salir.
En lo ofensivo, los calagurritanos generan más peligro de lo que marcan sus estadísticas. Solo ocho goles en diez jornadas, un balance exiguo donde solo han marcado seis futbolistas: Julen Ekiza ha anotado 2 (en la primera jornada), mientras que Jorge Pérez, Pau Miguélez, Ekhi, Oier Herrera y Eneko Lizaso. Lo curioso es que todavía no ha marcado ni un solo delantero centro (ni Uzkudun, ni Kevin Soeiro, ni Raúl Rubio). “Es un equipo que merece más puntos de los que tiene y que tiene ocasiones para ganar todos los partidos”, tal y como ha dicho Diego Martínez en la rueda de prensa.
Para este partido, Pouso contará con todos sus futbolistas, a excepción de un Raúl Rubio que sigue lesionado. Hasta ahora, los jugadores más utilizados por el técnico son el mediocentro Castillo (848 minutos), Simón Lecea (836), Bolado (832) y el guardameta Gonzi (810). Pese a ello, la portería es una de las incógnitas. Después de una lesión de cinco meses, Miguel Martínez de Corta jugó su primer partido esta temporada el pasado sábado. Y el técnico no ha despejado la incógnita: “Yo lo tengo claro, pero ya lo veréis el domingo”.
Pitará el encuentro el colegiado Gaizka Legarra, pamplonés de 26 años. Hasta ahora, ha pitado tres temporadas en Segunda Federación y hasta ahora, ha pitado un partido a la UD Logroñés (el empate frente al Bilbao Athletic de esta temporada. Al Calahorra, ninguno.
