Dejó la política hace cuatro años porque entendía que no estaba rindiendo acorde a lo que la ciudad necesitaba de ella. Una legislatura después, Yolanda Preciado volvió a hacerse en mayo con la Alcaldía de Alfaro. Preocupada por la situación del Ayuntamiento, la alcaldesa está centrada en terminar “en tiempo y forma” todos los proyectos que están sujetos a subvenciones para no perderlas.
– Dejó la política hace cuatro años, ¿cuándo tomó la decisión de volver?
– Fue a principios de primavera de este año cuando me ofrecieron poder volver a la política. Había salido hace cuatro años por una decisión personal, porque llegó un momento en el que creí que no estaba cumpliendo con la exigencia que requería el cargo. En ese momento no me veía capacitada y decidí parar. Fue algo que sorprendió a todos, la verdad. Cuando me ofrecieron volver a presentarme me vi con las fuerzas suficientes, lo comenté en casa y dije que sí. Soy fácil de convencer.
– ¿En qué situación se ha encontrado el Ayuntamiento de Alfaro?
– Tengo a Julián Jiménez -anterior alcalde- por una persona muy competente y que sabe gestionar bien, pero había una falta de gestión en el último año impresionante. Así lo sentí en la reunión que tuvimos el alcalde y yo cuando salió del cargo. Noté que estaba sobrepasado y que tenía un marrón importante que ahora se quedaba en mis manos. Conforme hemos ido trabajando estas primeras semanas nos hemos dado cuenta de que era así: bajo cada piedra que hemos levantado nos hemos encontrado con un sapo.
– Uno de los problemas de los que se quejaba el anterior alcalde era de la falta de personal en el Consistorio.
– Es un tema importante; por eso hemos empezado con ello. Nos hemos encontrado con varios puestos de gente que se había jubilado hace un año que estaban sin cubrir. Además, teníamos la Oficina de Turismo cerrada por falta de personal, pero es que también hemos tenido que sacar una plaza de arquitecto, otra de gestión administrativa, otra de seguridad institucional… El problema fundamental es que hay un par de proyectos para los que ya tenemos el dinero de la subvención y que van muy retrasados en el tiempo. Y si no llegamos a los plazos, perderemos las ayudas.
– Uno es la rehabilitación del colegio José Elorza.
– Efectivamente. Hay, desde hace más de un año, un millón de euros en las arcas del Ayuntamiento, la ejecución de la obra es de diez meses y está todo lo anterior sin hacer. Queda licitarla, adjudicarla… Si a finales de noviembre no hemos empezado con las obras no vamos a poder llegar al plazo de cumplimiento (octubre de 2024), con lo que tendríamos que devolver la subvención. Estamos intentándolo y vamos a conseguirlo porque creemos que es un proyecto que merece la pena. Por eso hemos contratado a más gente para liberar de carga a algunos departamentos del Ayuntamiento.
– Otros municipios están desistiendo de los fondos que consiguieron Corporaciones anteriores.
– Nosotros no. Primero queremos intentarlo. Si vemos que no se puede, nos da lo mismo renunciar ahora que en diciembre; pero creemos que merece la pena intentarlo. Es una oportunidad única de recibir esas grandes cantidades, ya veremos cuándo se da otra de éstas. Pero estamos hipotecando nuestros propios proyectos para sacar estos adelante. Hay que aprovechar esa lluvia de dinero.
– Me hablaba de otro proyecto.
– Sí, el de la cubrición de las excavaciones arqueológicas y la creación de siete recorridos verdes por la zona. Para ese también tenemos ya alrededor de un millón de euros. Hemos mantenido varias reuniones y creemos que con la ampliación de plazo que hemos pedido es posible que lleguemos a tiempo de no perder la subvención. En este caso el dinero lo tiene el Ayuntamiento desde hace más de un año, pero el proyecto lo hemos recibido en el mes de julio.
– ¿Hay más prioridades para este inicio de la legislatura?
– Otra de las prioridades, sin duda, es agilizar la situación del polígono La Senda. Nos vendieron a bombo y platillo que las empresas iban a poder comprar terreno a 35 euros el metro cuadrado para poder ser competitivas y, de momento, de eso no había nada porque no había en el Gobierno de La Rioja ni un euro consignado en los Presupuestos.
Hay empresas que quieren ampliar desde hace tiempo en la zona y que no están pudiendo comprar al precio que se les prometió que iban a poder hacerlo. Estas tres cosas son ahora prioritarias.
– Supongo que eso deja un poco de lado los proyectos que tenía previstos.
– El año que viene habrá Presupuesto y habrá inversiones, pero ahora mismo estamos centrados en no perder los fondos europeos, que es nuestra prioridad.
– Además hay varias obras en marcha sin ejecutar.
– De momento hay que terminar el aparcamiento de caravanas, pues la empresa se marchó sin terminar la obra y también está sujeta a una subvención, y algo parecido nos ha pasado con la impermeabilización de los depósitos. Se hizo una gran inversión pero está sin terminar.
Además tenemos el Camino del Sotillo, que sólo tenemos el proyecto pero también tenemos una subvención y hay que terminarlo para no perderla. Me encantaría decirle otra cosa a los alfareños, pero esto es con lo que nos hemos encontrado.
