Menos a Herminia, la abuela de Cuéntame, al resto del universo político y mediático le ha pillado por sorpresa que el economista Ramón Tamames sea la persona elegida por Vox para liderar la moción de censura que se ha presentado este lunes y que pretende llevarse a cabo en el mes de marzo para hacerla coincidir, en caso de unas hipotéticas elecciones nacionales, con las municipales y regionales.
Destacado comunista en sus años mozos, firmante de la Constitución del 78, primer teniente de alcalde de Madrid con Enrique Tierno Galván y férreo defensor del ecologismo, Tamames cuenta con un amplio currículum en el que se podría añadir eso de veraneante en Mansilla de la Sierra.
Y es que el pequeño pueblecito de las Siete Villas es el lugar de cobijo estival de Ramón Tamames y, al menos, otros dos de sus hermanos, Rafael y Juan. También llegan allí cada verano sus sobrinos y, en menor medida, sus hijos.
En la pequeña localidad serrana todo son chascarrillos sobre la moción de censura y el veraniego vecino durante estos días. “A la gente del pueblo también le ha pillado por sorpresa, sobre todo por la edad”. El alcalde del municipio, José Manuel Ballesteros (PSOE), obviamente no está de acuerdo con la moción de censura presentada por Vox, pero reconoce que el pueblo le tiene aprecio al economista. “Yo creo que estuvo incluso este último verano. Es un señor muy inteligente; también sus hermanos, uno era uno de los mejores médicos de Madrid”, explica el primer edil.
La relación de la familia Tamames con Mansilla no viene de lejos. “No tienen familiares aquí. En el antiguo pueblo (a finales de los años 50 se desalojó para construir el embalse que mantiene sus ruinas bajo las aguas) no tenían casa. Cuando se construyó el nuevo, él y los hermanos compraron varias casas. Es un punto de reunión en verano para toda la familia”. Incluso cuentan con “una lanchita” que sacan en verano para navegar por el pantano.
El catedrático prologó hace años un libro sobre la historia del municipio, ‘Mansilla de la Sierra 50 años. Siglos de historia riojana’, escrito por José María Menéndez de la Cuesta Valls.
FOTO: EFE/Raquel Manzanares.
Como asiduo visitante en los veranos serranos de la localidad, decía de él que era “la reconstrucción de una historia ignorada por muchos, por casi todos; que vuelve a la luz y que permitirá reivindicar no pocas cosas por parte de los mansillanos”, además de añadir que era “un toque de optimismo sobre un futuro mejor, con nuevos emprendimientos de ganadería, gastronomía, caza y pesca, turismo y otras bases de futuro”.
Y es que Mansilla ha sido testigo de los paseos y cavilaciones del escritor y catedrático. “Yo diría que Mansilla es un pueblo de ganaderos y pastores, que se quedaron sin su vega natural para los cultivos de toda clase de productos de huerta, que eran de gran calidad. Y progresivamente, como nadie quiere ser pastor, la antigua cabaña de miles de ovejas se está viendo reducida casi a la nada. Por lo demás, el turismo no ha llegado todavía a un lugar tan recóndito, y tampoco nadie se lo ha propuesto seriamente”. Son algunas de las reflexiones que el líder de la moción de censura de Vox escribió hace un par de años sobre su particular refugio veraniego.
