Jorge Ruano es secretario general de Comisiones Obreras en La Rioja y vive este Primero de Mayo con cuatro reivindicaciones fundamentales: la contención de los precios, el aumento de los salarios, la igualdad y la reducción de los accidentes laborales.
– ¿En qué contexto llega este Primero de Mayo a La Rioja?
– Este primero de Mayo lo vivimos en un contexto de recuperación de los derechos en el empleo, la actualización de las pensiones, la creación de trabajo estable… se ha cambiado la tendencia de los últimos cuarenta años en esos aspectos. Sabíamos que la reforma laboral iba a tener un impacto rápido especialmente en los primeros meses y así se ha demostrado. Aún así, hay que seguir trabajando en muchos aspectos, hay que regular cuestiones como el dumping salarial.
– ¿Cuáles son las principales reivindicaciones de este año?
– Las reivindicaciones de este año están más pegadas a la situación actual que estamos viviendo. Es importante la contención de los precios porque es algo que va a condicionar el crecimiento. Tenemos que tener en cuenta que hay gente que va a tener que elegir entre comer o pagar el recibo de la luz y eso no se puede permitir. Hay que hacer el mismo esfuerzo que se hizo con los ERTE y buscar soluciones compartidas. Además hay que buscar fórmulas que repercutan en el incremento de los salarios y mantener en las que ya se ha trabajado; y no como piden ahora algunos gurús que su única solución parece ser aumentar la jornada laboral. Esto no funciona así, si hay que ajustar algo de los últimos acuerdos a los que hemos llegado con el gobierno y la patronal debe ser de manera consensuada.
– Además, la igualdad en el empleo sigue siendo una de las reivindicaciones de este año
– Es que hay que implantar medidas de igualdad en las empresas. Muchas empresas aún ven este tipo de medidas como un ataque y no como un valor añadido para su empresa. No podemos desperdiciar el valor añadido que supone tener a mujeres en las empresas. Hay medidas tomadas y hay empresas que quieren hacer cosas en ese aspecto pero no saben hacia donde tirar por eso son tan importantes los planes de igualdad. Hay muchas cosas en las que seguir trabajando en este aspecto. Los hombres tienen más complementos salariales por temas como la disponibilidad y son esas horas las que generan determinadas brechas salariales. El problema no es que una mujer cobre menos que un hombre porque eso es discriminación, el problema es que a igual trabajo hay mujeres que tienen menor categoría que sus compañeros y por eso cobran menos. Un hombre por limpiar cristales tiene una categoría más que una mujer y eso es lo que no podemos consentir. A mismo trabajo, misma categoría y por lo tanto misma remuneración.
– Otro de los aspectos importantes de las reivindicaciones de este año es potenciar políticas que reduzcan los accidentes laborales
– Es que es un tema gravísimo, no sólo porque afecta a la vida de las personas sino porque además crean un agujero económico para las empresas y en La Rioja tenemos un problema muy importante en ese sentido. Somos la cuarta comunidad autónoma con un índice más alto de accidente laborales pero es que somos la tercera que más ha incrementado este índice en el ultimo año. Está claro que hay que cambiar las cosas porque lo que estamos haciendo hasta ahora no funciona.
– A mucha gente le sorprende que ante la situación que se está viviendo, los sindicatos no hayan salido a la calle.
– Sólo hay que tirar de hemeroteca para saber que esto no es así. Siempre que ha habido imposición o se han recortado derechos, sea el gobierno que sea, los sindicatos hemos salido a la calle. Lo hemos hecho con partidos de izquierdas y de derechas. Y cuando tenemos que ser críticos con los gobiernos, lo somos. Los sindicatos y la patronal junto al gobierno hemos sido los únicos que hemos llegado a acuerdos mientras los partidos políticos se estaban tirando los trastos a la cabeza. Hemos salido a la calle como forma de presionar en las negociaciones y lo seguiremos haciendo.
– Parece que el empleo en La Rioja no está teniendo el mismo tirón que en el resto de las comunidades.
– Eso tiene que ver mucho con cómo se conforma la economía regional. Además hay que tener en cuenta que somos una comunidad pequeña en la que cualquier cambio se nota más que en el resto de comunidades. En La Rioja siempre vamos a pie cambiado. El verano, por ejemplo, no es bueno en cuanto a empleo en nuestra región, como sí lo es en el resto de España. Sin embargo, llega el final del verano y la agricultura empieza a tirar del empleo. Nuestra hostelería tiene mejores datos el resto del año que en verano, por ejemplo. Además la industria tiene un peso importante en la región y eso estabiliza el empleo. No creo que los datos regionales sean malos. El gran reto de La Rioja es que aumente el tamaño de las empresas que deben crecer porque eso provoca mejorías en cuestiones como la formación, la innovación, la tecnología… Por ahí es por donde tenemos que avanzar.
– Si pudiese elegir cómo terminar el año es cuestiones de empleo, ¿qué pediría?
– Me gustaría terminar el año con una negociación colectiva cerrada en toda la región, que todos los convenios colectivos estuviesen cerrados que el empresario y el trabajador sepan a qué atenerse y que eso permita retener el talento, la igualdad y la seguridad en el trabajo. Hay sectores como el comercio que lleva diez años sin convenio y otros como el agropecuario, que incluye a los temporeros de un sector tan importante como el del vino, sin convenido desde hace ocho años y con muchos temporeros viviendo en la calle durante la vendimia año tras año. Con eso y con la estabilidad que está ofreciendo la reforma laboral creo que tendríamos una base excelente para arrancar la recuperación con grandes expectativas.
