Educación

El Decreto de Convivencia evitará la expulsión disciplinaria de alumnos

El Decreto de Convivencia que la Consejería de Educación prevé presentar a primeros de mayo evitará recurrir a las expulsiones disciplinarias de alumnos y potenciará, cuando sea necesario, que algunos estudiantes acudan a “aulas de convivencia” dentro de los centros.

Así lo ha explicado el consejero de Educación, Pedro Uruñuela, que este jueves ha detallado diferentes aspectos de este decreto durante la apertura del Congreso Estatal de Convivencia, que ha inaugurado la Ministra de Educación, Pilar Alegría.

En la norma redactada por su departamento se profundiza en “cómo gestionar los conflictos” en los centros educativos, “en el sistema de mediación o en el de prácticas restaurativas” y se busca crear el concepto de “centro seguro, libre de violencia”.

Uruñuela ha incidido en que el decreto “subraya el valor de las normas” porque “todo grupo humano tiene que tener normas” pero en los centros educativas “estas tienen que estar al servicio del desarrollo de la persona y no para controlar al alumnado”.

Además la normativa incidirá en “las competencias necesarias para la convivencia” y “el papel del alumnado y las familias” dentro de los centros. Ha explicado que espera que la primera semana de mayo pueda presentar el decreto al Consejo de Gobierno para su aprobación, tras lo que se abrirá un pazo de 4 años para implantarlo y llevarlo a la práctica.

En la práctica, ha destacado, uno de los objetivos de esta norma es “que no se expulse a ningún alumno, como sanción, sobre todo en los institutos, que es donde más sucede”. Para ello se crearán “aulas de convivencia en los centros” donde los alumnos “podrán reflexionar, expresar sus emociones, buscar alternativas y promover dentro del centro un cambio de actitud y conducta”.

Se busca así “ganar al alumno, recuperarlo, no echarle fuera, que es lo más fácil” porque “un estudiante que se comporta de una determinada manera está manifestando una necesidad personal o educativa que tenemos que atender”.

“Lo más cómodo es mandar al alumno 15 días a casa”, ha insistido el consejero, que cree que en lugar de eso “hay que saber porqué se comporta así, porqué lo hace en una determinada materia, qué necesidad tiene, si necesita más atención personal o mejorar la base de aprendizaje”, por ejemplo.

Además, el decreto establecerá que en todos los centros habrá un responsable de convivencia, con horas dedicadas a la atención a esta materia o programación de actos, entre otras cuestiones.

También se aboga por “una elaboración participativa de las normas” y se establece que “en el currículum educativo se va a incluir el tratamiento de conflictos, que es un tema fundamental”.

Uruñuela ha incidido en que esta normativa “no es algo que me invento yo” sino que “recoge todas las aportaciones en este área que hay en muchas comunidades autónomas” para “poner este trabajo por la convivencia en el centro de la labor educativa”.

“La escuela es la única institución por la que pasan todos los niños y niñas, en la mayoría de los casos durante 15 años y por eso sería irresponsable no educar en aprender a convivir y relacionarnos pacíficamente”, ha concluido Uruñuela.

Subir