La empresa riojana Aresol y el Ayuntamiento de Bañares han impulsado un ambicioso proyecto para la formación y generación de empleo en materia de energías renovables. La primera promoción, ya en fase de prácticas, está dentro del ‘Curso de montaje y mantenimiento de instalaciones solares fotovoltaicas’ que el consistorio riojalteño y la compañía fotovoltaica imparten en el Centro Juvenil de Formación y de Acercamiento de la Administración, Atención al Ciudadano’. Se trata de un proyecto piloto y emblemático para la dinamización del medio rural ante el reto demográfico y la despoblación, subvencionado por el Gobierno de La Rioja.
El proyecto repercutirá tanto en la comarca de Santo Domingo de la Calzada como en toda La Rioja Alta, especialmente a nivel laboral. Ofrece la oportunidad a diez personas, prioritariamente residentes en Bañares y alrededores, para formarse en esta materia de forma teórica y, sobre todo, práctica. Esto les permitirá incorporarse a trabajar no solo en la empresa Aresol, sino en cualquier otra empresa del sector. Además, les permitirá iniciar una actividad laboral como emprendedores en una actividad que se considera esencial por su importancia medioambiental, económica y social.
El Ayuntamiento de Bañares dota a su proyecto piloto de las infraestructuras y medios para desarrollar la actividad docente, tales como los locales, el mobiliario, el material didáctico y tecnológico, la coordinación y la dirección del proyecto. La colaboración de Aresol a esta iniciativa supera los 100.000 euros e incluye no solo el profesor y los tutores profesionales, los materiales y equipos necesarios para la formación teórico-práctica, sino, también, la remuneración de los alumnos durante la continuación de su formación laboral en Aresol.
El curso tiene una duración de 564 horas, 324 de las cuales se han impartido ya en el Centro Formativo del Ayuntamiento de Bañares y las 240 horas restantes se están llevando a cabo bajo contrato laboral con la empresa Aresol.
El alcalde de Bañares, Antonio Ortiz de Landázuri, explica que existía una “preocupación” del ayuntamiento por la ausencia de oportunidades generadoras de atractivo para que la población se mantenga, acuda al municipio y vea en la localidad un lugar en el que iniciar su proyecto de vida. “Esto motivó la solicitud de dos proyectos pilotos y emblemáticos al Gobierno de La Rioja, que iniciaron un proceso de búsqueda de oportunidades en este sentido”.
El segundo proyecto es el citado centro juvenil de formación y de acercamiento de la administración-atención al ciudadano. Dentro del mismo, entre otras cosas, se ofrece formación en TIC, envejecimiento activo y energías renovables. “La experiencia está resultando muy positiva y el compromiso de la empresa Aresol ha sido total”, añade.
Por eso, el Ayuntamiento de Bañares apostará por la continuidad de proyectos piloto pioneros en una población de estas características para dotar de oportunidades laborales y sociales al municipio y su zona, “procurando el fomento del asentamiento poblacional y abriendo el abanico de posibilidades medioambientales, laborales y socioeconómicas”.
Generación de empleo
La ejecución de una planta solar como la de Aresol contribuye a crear un número relevante de puestos de trabajo. Especialmente durante el período de construcción de la misma, cuyo plazo aproximado es de 18 meses, pero también durante el período de explotación, cuya duración se estima en un total de 40 años.
La operación y mantenimiento (O&M) representa aproximadamente un tercio de todos los trabajos y el valor agregado bruto de la industria solar. Dado que los servicios de O&M se brindan durante la vida útil total de las instalaciones solares, esta es una fuente de trabajos a largo plazo que no se ven afectados por las fluctuaciones del mercado.
Se prevé que los trabajos de O&M crecerán significativamente y se convertirán en el segmento de trabajo más importante para los próximos años. Estos puestos de trabajo se crean localmente, no se pueden reubicar y, por lo tanto, contribuyen al desarrollo socioeconómico local a largo plazo.
La agricultura y ganadería, cada vez más mecanizadas, requieren paulatinamente menos mano de obra. El terreno dedicado a estas actividades no genera aumento de ocupación que se asiente en las pequeñas poblaciones y detenga su despoblación. Esta iniciativa pretende paliar ese efecto.
Cabe recordar que Aresol ha previsto una inversión superior a los 270 millones de euros en su proyecto solar en La Rioja Alta, donde también impulsa estas iniciativas formativas y laborales. Asimismo, la compañía riojana recuerda que esto redundará en mayores ingresos fiscales para los ayuntamientos y la comunidad en concepto de tasas, permisos, impuestos y otros gravámenes.
