Aunque el impacto de la invasión rusa a Ucrania ha alcanzado a todos los rincones del país, nadie lo ha sentido tanto como los españoles que en algún momento se han visto atrapados por el estallido de la guerra. Ese es el caso del exfutbolista riojano Jorge López, que al llegar a España se marcó un reto: encontrar una segunda oportunidad para 22 jugadores ucranianos.
El exfutbolista logroñés, a la sazón director de la academia del FC Krypbas, ha tirado de agenda para que una veintena de jugadores desplazados puedan seguir desarrollando sus carreras profesionales lejos de la guerra. “Última parada del viaje”, ha expresado Jorge López en sus redes sociales, mostrándose “feliz y agradecido con todos los equipos y personas que han colaborado en que hoy estén 22 jugadores en España haciendo lo que más les gusta y que, por desgracia, no pueden hacerlo en su casa”.
FOTO: Escuela de Fútbol de Huesca.
Gracias a sus gestiones, los jóvenes futbolistas han encontrado un hueco en las estructuras de entidades como el Valencia, el Levante, la Cultural Leonesa, el Cádiz, el Real Valladolid, Osasuna y la Escuela de Fútbol de Huesca, que “sin tener las posibilidades de un club profesional ha hecho un esfuerzo tremendo para traer jugadores en un ejemplo de solidaridad que define por sí solo a sus responsables”.
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