No es la primera vez que habla tan claro sobre su paso por la UD Logroñés, pero en esta ocasión se ha despachado aún más a gusto que en anteriores entrevistas. El exguardameta blanquirrojo Dani Giménez ha recordado en el canal de Youtube ‘Lo simple no vale’ su estancia en la capital riojana durante la temporada que el equipo presidido por Félix Revuelta debutó en Segunda División. Las críticas hablan por sí solas.
“La afición es una pasada: gente joven, ganas de fútbol de locos… fue una pena porque no vieron ningún partido en el campo. El resto es un desastre. Hice una entrevista y no me arrepiento de lo que dije porque es tan desastre la gente que lleva ese club… son buena gente, pero hacen todo mal. No teníamos utillero en Segunda División, los campos de entrenamiento eran un desastre, la ropa que nos daban estaba sucia y en los viajes nos metían en un vagón con gente en pleno COVID”, relata el portero vigués.
No acaba ahí la cosa. “La comida que nos daban: un día después de diez horas de viaje nos dan un bocata de jamón con tres lonchas. Entrenábamos con porterías de fútbol siete en un equipo profesional de Segunda División. Yo me ofrecí a comprarlas y no me dejaron. Y mil cosas más”. Eso, apunta Dani Giménez, le fue minando la moral. “Pedí la portería y alguna cosa más, pero te preguntas que qué pasa con el club. El dueño es multimillonario, es el dueño de Naturhouse, pero pasa del equipo. Y entonces dices que qué pasa aquí”.
Y el meta gallego sigue enumerando ejemplos de la falta de profesionalización en un club debutante en Segunda División. “El míster quería comprar unas mantas para el frío porque el club no las quería dar para los jugadores y no había estufas porque no querían gastarse trescientos euros cuando entrenábamos al lado del río. Luego hablas con tus amigos y la gente se cree que el Logroñés es un gran equipo. La ciudad y la gente son espectaculares, pero no saben lo que es el club”.
Lo que sí reconoce Dani Giménez es que el club ha mejorado este año. Pasos lentos. “Están en Primera RFEF y el equipo paga bien porque tiene buenos jugadores, pero tiene que tener unos mínimos. ¿Qué iba a hacer el entrenador si no donde entrenábamos no podíamos dar tres pases seguidos? ¿Cómo valoras a ese entrenador? Luego le raja todo el mundo y le dice que es muy malo, que los jugadores no dan tres pases seguidos. No se defendía ni al jugador ni al entrenador en ese club y eso me llevó a pensar en retirarme”.
Retirado del fútbol en activo, el guardameta vigués confiesa que tuvo ofertas para seguir jugando, pero después de su paso por Logroño se dijo que no le apetecía seguir sufriendo. “Prefiero estar suplente en un equipo bueno, ayudando al chaval que esté jugando, que irme de primer espada a otro sitio. Y no llegó la oferta”.
