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Violeta, la tienda ‘curvy’ de Logroño, se despide

Violeta by Mango, la tienda ‘curvy’ de Logroño, se despide

“Con vuestras tallas ayudáis a mucha gente. Gracias por pensar en nosotras; no todo el mundo es ‘perfecto'”. “Por fin me llevo a casa ropa que me encanta y no solo porque me vale”. “Gracias a vosotras comprar vuelve a ser divertido”. Frases como esta pueden leerse en el libro que preside el mostrador principal de Violeta by Mango en Logroño. Un establecimiento que cerrará su tienda de Juan XXIII en apenas dos meses.

La división femenina de Mango para tallas grandes pone punto final a su andadura después de 7 años ayudando a las mujeres, independientemente de su figura, a seguir las tendencias del resto de marcas. La empresa española, número dos del país por volumen de negocio, ha decidido reorganizar su estructura integrando su línea de tallas grandes en la cadena principal.

Allá por 2014 la compañía anunciaba la puesta en marcha de una nueva línea de moda para las mujeres ‘curvy’. Violeta llegaba como un concepto no de tallas grandes, sino una cadena con patronaje adaptado a tallas hasta la 52, con una colección y tejidos específicos. Pero que no cunda el pánico. No es un adiós definitivo, sino el comienzo de una nueva etapa.

A partir de agosto, las prendas de Violeta se irán incorporando en las tiendas de Mango y posteriormente se ofrecerá una parte de la colección de la línea Woman de Mango en tallas grandes, concretamente, hasta la 54 de la colección principal de la marca. Con esta decisión, “queremos ampliar nuestra oferta y así unificar todas las líneas en una sola con el objetivo de aumentar las ventas en el sector de tallas grandes, un segmento en el que hemos detectado gran demanda a través de Violeta”, señalan fuentes de la empresa.

La preocupación entre las clientas que acuden estos días a Violeta se nota. “Por fin teníamos una tienda donde la gente joven encontramos prendas confortables, actuales y, sobre todo, femeninas. Todas tenemos derecho a lucirnos sin dejar de ir a la moda o parecer que vamos disfrazadas, pero, ¿ahora qué?”, lamenta Ana, clienta habitual. La falta de opciones que hoy en día hay en cuanto a este tipo de comercios sigue siendo un quebradero de cabeza para muchas mujeres, “así que confiamos en que Mango no nos eche en el olvido y cumpla su propuesta”.

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