La normal anormalidad de las rachas del Logroñés. Sólo desde esa perspectiva se puede entender que el equipo blanquirrojo sume seis victorias consecutivas y seguidamente encadene cuatro derrotas. Así ha comentado Sergio Rodríguez el análisis de la situación después de caer en Girona (2-0).
– ¿Cómo valora el encuentro?
– Sabíamos que iba a ser un partido complicado porque los dos equipos andamos en dinámicas diferentes. Ellos en creciente y nosotros no estamos en un buen momento en cuanto a resultados. El gol ha marcado el partido porque hasta el gol ha estado igualado. La primera parte hemos estado sin presencia en campo contrario aunque sin sufrir en exceso. En la segunda parte estábamos mejor y teníamos más presencia, ha llegado el gol y ha sido un mazazo. A partir de ahí, el equipo se ha desequillibrado demasiado pronto, lo que ha provcado que nos hagan el 2-0. Si no se hubiese anulado el gol de Ander, hubiésemos tenido opciones de entrar en el partido.
– Tras perder en Vallecas, hablaba de un bache. Después de perder hoy, ¿el bache se ha convertido en crisis?
– Cuatro derrotas consecutivas son muchas, pero sabemos los rivales que hemos tenido. El calendario era complicado en este tramo y, por suerte, veníamos de una racha muy buena donde conseguimos muchos puntos. Eso nos hacía estar en una situación tranquila, pero si esto se prolonga tendremos problemas. Sabemos cómo es la Segunda División y es complicado sacar puntos si no estás en tu mejor versión. Hay que seguir mejorando, no mirar la clasificación y pensar que cada partido es definitivo. Si no estás al cien por cien, los partidos se te van en un detalle. El domingo tenemos un partido contra un rival, a priori, superior a nosotros y lo intentaremos poner difícil. Ya dijimos que hay ciclos, momentos y altibajos. Hay que mantener la tranquilidad, confiar en el grupo y retomar los buenos resultados.
– El resultado se puede ver desde la capacidad de competir ante el Girona o desde la cuarta derrota, un 2-0… ¿cómo se gestiona en el vestuario?
– Nos tenemos que quedar con las cosas positivas. Creo que hemos sido un equipo competitivo hasta el gol. Estábamos esperando a que el Girona arriesgase por el hecho de jugar en casa y ser superior para tener más mordiente en la segunda parte. Los goles marcan mucho. Tampoco se puede esconder que es la cuarta derrota consecutiva y lo sabemos. Creo que lo primero nos tiene que servir para entender que si estamos a nuestro máximo nivel desde todos los puntos de vista podemos competir con cualquiera, aunque sabemos que es la cuarta derrota y hay que intentar cortar la mala dinámica.
– ¿Cuál es su mayor preocupación?
– Todos somos conscientes de que la competición es difícil y de que el calendario era complicado. Anímicamente estamos tocados porque a nadie le gusta perder cuatro partidos seguidos, pero hemos competido todo lo que nos han dejado porque el día del Mallorca fue imposible. La plantilla es muy equilibrada en ese sentido. Estamos un poco tocados, somos conscientes y tenemos perspectiva de cómo es la competición, pero también creo que a principio de temporada nos dijesen que íbamos a estar a esta altura en esta posición y con estos puntos lo hubiéramos firmado. Al final, la temporada es un cómputo general y no son cuatro, cinco o seis partidos concretos.
– ¿El error puede estar en ser generoso por ir a por el 0-1?
– No tengo esa sensación. Creo que ha sido una jugada puntual. Estábamos manteniendo bien el equilibrio. Un balón que iba fuera, hemos pecado de pasividad, se ha vuelto la pelota al centro del área y no estábamos con la preparación adecuada. Esa jugada nos ha marcado mucho. Cuando las cosas no salen y te ves por debajo, siempre cuesta un poco más a nivel de juego y anímico. Después del gol sí que hemos ido a por el partido de forma descompensada y quedaban muchos minutos. Siempre hablamos de que después de los goles pasan cosas y no es lo mismo estar 1-0 que 2-0.
