Apenas dos años han pasado desde que Juan Carlos Salcedo y Mauricio Llagunas llegaron a Logroño desde Calahorra para hacerse cargo de la cafetería de la estación de ferrocarril. Tras muchos años a sus espaldas en la hostelería, se embarcaron en el negocio de ‘Las vías’ con vistas a la apertura de la estación de autobuses.
Pero eso, de momento, no ha llegado. “Es más, dicen que hasta finales de 2022 no empezará a funcionar. Entre eso y la pandemia, por la que se han quitado 18 trenes diarios, hemos decidido bajar la persiana”, explica Llagunas.
Desayunos completos para tomar en el local o para llevar, “sobre todo las personas que viajaban por la mañana pronto a Madrid y Barcelona”; platos combinados, bocadillos, raciones, pinchos y menús del día hacían del bar un lugar privilegiado para hacer una parada entre viaje y viaje.
“No se puede estar así. Hoy cerramos, mañana podemos abrir, pasado solo la terraza, a los dos días solo el cincuenta por ciento del aforo… Lo siento pero se nos han quitado las ganas. Antes por lo menos pensabas en lo que podía venir con la estación de autobuses en funcionamiento pero sabiendo que hasta dentro de dos años nada… dejamos la hostelería”.
Salcedo y Llagunas reconocen que el agotamiento mental les ha sobrepasado. “Tiraremos de ahorros para sobrevivir e intentaremos desintoxicarnos fuera de aquí de todo lo que está pasando. Después, ya se verá, pero ahora no queremos saber nada de la hostelería”.
Dejan la dirección del local, pero Mauricio explica que su socio Juan Carlos se queda con el negocio para alquilarlo. “Esto es lo que hay. Mucho ánimo a nuestros compañeros hosteleros, pero nosotros no podemos más”.
