La ‘Dolorosa’, el ‘Vía Crucis’ o la procesión del ‘Santo Entierro’ tendrán que aguardar un año más para ser veneradas. Días grises para las cofradías riojanas, que tienen que afrontar “con resignación” la suspensión de la Semana Santa.
Los Disciplinantes de la Cofradía de la Santa Veracruz de San Vicente de la Sonsierra deberían estar este día de Jueves Santo preparando sus atuendos para la procesión de ‘los Picaos’, una de las manifestaciones religiosas referentes a nivel regional.
Su portavoz, Teodoro Ruiz, todavía se muestra estupefacto ante tal realidad: “En el pueblo no se recuerda un año sin las procesiones de Semana Santa desde los años de la República. Hemos intentado aguantar hasta el último momento para evitar que esto sucediera pero vimos que ante todo al salud de la ciudadanía estaba por delante”.
Como San Vicente son muchos los municipios que durante estos días festivos decoran sus balcones con representaciones religiosas que aluden a las procesiones y los ‘pasos’ más característicos. Además, en plena era digital, la comunidad religiosa no se ha querido quedar atrás y desde ayer, con la procesión de ‘El Encuentro’, se ha provisto de las plataformas digitales oportunas para hacer retransmisiones virtuales de las ceremonias a través de imágenes y grabaciones de años anteriores para evocar los sentimientos de los cofrades durante estas fechas, tal y como han anunciado este jueves tres cofradías logroñesas.
“Una iniciativa”, según apunta el obispo de la Diócesis de Calahorra y La Calzada-Logroño, Carlos Escribano, “que permite conectar a los propios párrocos con su comunidad, potenciando así la realidad de las ‘iglesias domésticas’ que están resultando ser un verdadero descubrimiento para muchos feligreses”. Con motivo el confinamiento, desde el seminario han desarrollado lo que denominan ‘parroquia virtual’ para “no perder esa cercanía con el público”, desde la que retransmiten las ceremonias en directo.
Son días en los que más allá de la carga emotiva que suponen también reflejan una de las mejores temporadas turísticas del año. Ruiz asegura que durante la Semana Santa de un año habitual “los comercios de la localidad pueden llegar a recaudar casi el 30 por ciento de su facturación anual”, por lo que parte de la economía también se va a ver resentida. La Cofradía mira ahora con expectación la evolución de la epidemia a la espera de que el próximo 10 de mayo se pueda celebrar la procesión de la Cruz de Mayo, uno de los encuentros religiosos más importantes del municipio.
